Londres, (EFE).- El Reino Unido no debe permitir a los padres elegir el sexo de los bebés, indica la Autoridad de Embriología y Fertilización Humana (HFEA, siglas en inglés) en un estudio publicado.
Según ese organismo, sólo se debe autorizar la elección del género por razones estrictamente médicas, como la hemofilia.
Las conclusiones, que se presentan en forma de recomendaciones al Gobierno británico, son resultado de un período de un año de consultas con el público británico.
De acuerdo con la HFEA, el ochenta por ciento de las personas consultadas se mostró contraria a la técnica, por lo que se debe mantener la actual prohibición de la elección del sexo.
La presidenta de la HFEA, Suzi Leather, dijo que hubo un "gran consenso público" contra la elección del género, a menos que fuera para proteger al bebé de alguna enfermedad.
"La visión del público fue que se debe valorar la naturaleza incondicional del amor de los padres", declaró Leather a la BBC.
Según la presidenta del organismo regulador, la decisión de mantener la prohibición sobre la selección del sexo fue difícil y se consideró la opinión del público y la de los expertos.
No obstante, Leather admitió que no será posible prohibir a la gente viajar al extranjero para someterse a esta prueba de selección del sexo del bebé.
Las conclusiones del HFEA fueron bien recibidas por médicos y expertos en fertilidad.
El titular británico de Sanidad, John Reid, señaló que apoya la opinión del público de que no se debe elegir el sexo de los hijos por razones puramente sociales.
"Puedo confirmar que mientras yo sea ministro de Sanidad, la selección del sexo sólo será permitida por razones médicas. Vamos a considerar cuidadosamente si se necesita cambiar la ley para asegurar que esta prohibición se mantenga efectivamente", afirmó.
La portavoz de la Sociedad Británica de Fertilidad, Alison Murdoch, explicó que, "al igual que el público en general, la mayoría de nuestros miembros quieren la selección del sexo sólo cuando hay importantes razones médicas".
Esa opinión coincide con la de la Asociación Médica Británica, cuyo presidente, Michael Wilks, dijo que "la selección del sexo por razones puramente sociales es inaceptable".
Sin embargo, el director del Centro de Reproducción Asistida, Simon Fishel, señaló que las familias que quieran tener la opción de la elección se verán obligadas a viajar al extranjero.
Nicola Chenery, quien dio a luz a mellizas a principios de este mes tras viajar a España para someterse a la tecnología de selección del género, dijo que se trata de un procedimiento como la fertilización in vitro.