POR RAFAEL IBARRA CAMACHO
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- El director de la clínica 71 del Instituto Mexicano del Seguro Social, Arturo González Valdez, reconoció que la bomba de cobalto que es utilizada para dar tratamientos de quimioterapia, sufrió un desperfecto y aseguró que en ningún momento hubo fuga de radiación.
Sin embargo, el área donde se presentó este problema sigue cerrada y a partir del próximo sábado los especialistas van a desarmar este aparato para instalar un nuevo equipo que tiene un costo de 20 millones de pesos, mismo que vendrá a sustituir el equipo averiado que tiene 15 años de antigüedad.
?Ya teníamos contemplado cambiar la máquina, con el nuevo equipo va a aumentar la capacidad y vamos a poder atender a más pacientes?, dijo el director.
El equipo descompuesto tiene una capacidad de ocho mil curies y se atiende a 50 pacientes diarios, el nuevo equipo de radioterapia tiene una capacidad de 15 mil curies y se proyecta atender a 80 pacientes por día.
González Valdez recalcó en varias ocasiones que la descompostura de la bomba de cobalto no representaba ningún peligro, pues aseguró que los rayos radioactivos no rebotan porque se quedan en las paredes de esta área que está construida en forma de laberinto para evitar que algún rayo pueda salir de la cámara.
Al realizar un recorrido por el área de quimioterapia, se pudo constatar que la cámara donde se encuentra la bomba de cobalto permanece cerrada y la puerta está sellada con una calcomanía que indica ?peligro-radiación?, misma que fue colocada por el especialista que vino desde la capital del país para tratar de reparar la descompostura que sufrió este aparato.
El director les preguntó a los técnicos especialistas que si podían retirar la calcomanía para entrar a ver el aparato descompuesto, finalmente los especialistas no se atrevieron a ingresar al área aunque siguieron asegurando que no había ningún peligro.
El próximo sábado van a venir especialistas de la capital del país para empezar a desmantelar la bomba de cobalto y el lunes 24 de febrero van a comenzar a instalar el nuevo equipo de quimioterapia, todos estos trabajos tardarán de dos a tres semanas, González Valdez aseguró que antes de poner a funcionar el nuevo equipo, éste debe ser calibrado y sometido a varias pruebas.
Por este motivo, los pacientes que requieran de algún tratamiento de quimioterapia serán trasladados a la ciudad de Durango.
El director de la clínica 71 del IMSS aseguró que todo estaba previsto y agregó que por esta razón no se estaban aceptado nuevos pacientes: ?Son 20 personas las que están por terminar su tratamiento, ya tenemos todo listo, las vamos a mandar a Durango para que continúen con su tratamiento?, dijo.
Cabe señalar que la bomba de cobalto que va a ser retirada tiene una antigüedad de 15 años, ahora que se presenta este desperfecto las autoridades anuncian que ya tenían contemplado sustituirla desde hace algunos meses, sin embargo anteriormente no se había dado a conocer este proyecto.
González Valdez asegura que en ningún momento existió peligro por esta avería y sostiene que los rayos no rebotan y no pueden salir de la cámara, sin embargo, el pasado lunes por la tarde cuando el representante de El Siglo de Torreón acudió a la clínica 71 del IMSS para cerciorase del desperfecto, la cámara de la bomba de cobalto se encontraba ?sellada? con cinta adhesiva, ¿simple precaución?.
A medias
Aunque la Jurisdicción Sanitaria número VI tiene la obligación de revisar dos veces por año todos los aparatos médicos que utilizan radiación, el personal de Regulación Sanitaria y Salud Ambiental de esta dependencia reconocieron que cumplen a medias esta encomienda porque no cuentan con el equipo necesario para verificar estos artefactos.
?A nosotros nos corresponde vigilar que no haya radiaciones dispersas, pero lamentablemente no tenemos equipo, hay un equipo para todo el Estado y las jurisdicciones nos tenemos que turnar para poder utilizarlo, por eso nada más revisamos una vez al año?, dijo un funcionario de la Secretaría de Salud que solicitó el anonimato.
Por su parte, el director de la Unidad de Protección Civil Municipal, Roberto Moreno Roldán, reconoció que esta dependencia no tiene el equipamiento necesario para enfrentar una contingencia relacionada con radiación ionizante.
?Definitivamente no tenemos capacidad para enfrentar una situación de este tipo y eso pasa en muchas partes de todo México, nosotros acudimos para ayudar a evacuar la clínica en caso de que fuera necesario sacar a la gente del edificio?, dijo el funcionario municipal.