SALTILLO, Coah.-- Gracias a la amplia participación de la ciudadanía, sobre todo ejidatarios y organismos no gubernamentales, en México se pudo reforestar más de 230 mil hectáreas de vegetación durante el año pasado, de las 600 mil que destruyeron los incendios forestales, destacó el director de la Comisión Nacional Forestal (Conafo), Alberto Cárdenas Jiménez.
Reconoció la valiosa participación de las comunidades rurales y de los ecologistas de la sociedad civil, que de manera voluntaria y gratuita se involucran no sólo en combatir los incendios, sino en las labores de reforestación.
“Hay una gran participación, pero esto no se ve, porque donde reforestamos es en las sierras, y nos falta difundir más lo que se ha hecho en las reservas naturales ubicadas en las partes altas del país”, expresó.
Asimismo, destacó la intervención del Ejército, tanto en las labores de apagar los siniestros, como en los trabajos de reforestación.
Dijo que en este sentido el Ejército mexicano es un ejemplo a nivel mundial, ya que se involucra en esta labor más que ninguno en el mundo.
“Pocos ejércitos reforestan, pocos ejércitos en el mundo tienen viveros como los tiene el nuestro, que nos ayudan a reforestar significativamente las zonas incendiadas”.
Por otro lado, dijo que de las 600 mil hectáreas de vegetación incendiadas, sólo un 15 por ciento corresponden a árboles grandes, el resto son arbustos y pastos secos los que se quemaron.
Al respecto, dijo que muchas veces un incendio forestal resulta más benéfico que perjudicial, porque al quemar los pastos y arbustos permite una regeneración increíble en las zonas forestales incendiadas, porque el fuego causa una poda natural.