San Diego, (Notimex).- Napster, el portal pionero de internet en el ingreso y copia de archivos de las principales disqueras estadounidenses y que desafió las leyes de derechos de autor, proyecta regresar en breve, pero más sumiso que nunca.
La Asociación de Industriales de Música Grabada de Estados Unidos (RIAA), que demandó y logró la imposición de órdenes de restricción por tres años consecutivos a Napster hasta debilitarlo, muestra ahora su agrado con el proyecto.
"Es un interesante concepto que prueba la importancia de la alta tecnología como vehículo de venta de música", dijo la presidenta de la asociación, Hilary Rosen.
El presidente de la empresa Roxio, como en lo sucesivo se llamará Napster, Chris Gorog, dijo que la firma enfrenta un difícil periodo de ajustes de mercado, hasta que obtenga ganancias de lo que quedó del portal más popular de la música hasta el verano pasado.
Roxio Incorporated pagó casi 40 millones de dólares por el cadáver de Napster, con la intención de formar una asociación con Sony y Universal, dos de las cinco disqueras que integran la asociación.
El portal tenía previsto salir al mercado este año con un nuevo servicio por suscripción, lo que hubiera permitido a los cibernautas copiar piezas de ambas disqueras.
Pero mientras, tanto Apple lanzó un servicio parecido que deja copiar con autorización a los usuarios canciones y piezas de otras disqueras por 99 centavos de dólar cada una.
Mientras tanto, los sitios Kazaa y Grokster mantienen servicios similares a los del antiguo Napster, con la variante de que les es imposible controlar lo que hagan en esos portales unos diez millones de usuarios.
Esa incapacidad técnica de los portales deriva ahora en dificultades para la corte federal de California, que tampoco puede imponer a Kazaa y Grokster órdenes de restricción como las que utilizó en el caso de Napster.
Según Roxio Inc., los avances de otros sistemas y empresas harán que Napster resurja en el mercado a mediados de 2004, pero como portal de suscripción.
Todavía en 2001, Napster registraba el ingreso simultáneo de unos 60 millones de usuarios de todo el mundo, la mayoria de ellos con la intención de ingresar a los archivos de disqueras comerciales.