Madrid, (Notimex).- El Museo del Prado, la mayor referencia cultural de España, vive un proceso de reforma física y jurídica que pretende duplicar su espacio de exposición y triplicar sus recursos financieros, informó una fuente oficial.
El Ministerio de Educación, Cultura y Deporte señaló que el Consejo de Ministros aprobó en su última sesión el proyecto de Ley de Modificación del Estatuto Jurídico, por el que el Museo dejará de ser, tras 18 años, un organismo dependiente del propio Ministerio.
El Museo del Prado, que posee una colección de ocho mil 600 pinturas y 700 esculturas, y que por problemas de espacio sólo puede exhibir una séptima parte de las mismas, se convertirá en una Entidad de Derecho Público con capacidad para obtener recursos propios. La ampliación de su superficie implica también un aumento de visitantes, pues se prevé que en 2009 se llegará a los 3.4 millones frente a los 1.7 del año pasado.
Se prevé que el presupuesto en el 2005 aumentará de siete millones de euros (siete millones 930 mil dólares) a 22 (24 millones 925 mil dólares).
A partir de la entrada en vigencia de la Ley, el Museo tendrá una figura similar a la del Instituto Cervantes o la del Banco de España, según la normativa de la administración pública de este país.
El texto pasará ahora al Congreso de los Diputados, donde se buscará el consenso entre las fuerzas políticas para proseguir en la "modernización de la principal institución cultural española", informó el Ministerio de Cultura en un comunicado.
El nuevo marco jurídico intentará dotar al Museo del Prado de un modelo de gestión parecido al de la National Gallery de Londres o del Museo del Louvre, de París.
Además del aumento de los recursos para la autogestión, el proyecto introduce la administración de los patrocinios, con las categorías de benefactores, protectores y colaboradores y el carácter plurianual de los principales capítulos presupuestarios.
Esto permitirá que en 2006 el nivel de autofinanciamiento de la pinacoteca sea superior al 50 por ciento frente al 27 por ciento actual.
Para el director del Museo, Miguel Zugaza, la reforma jurídica supone un "reconocimiento a la singularidad" del centro y no implica que el Prado se vaya a convertir en "un fenómeno comercial". En declaraciones a la prensa local, explicó que el nuevo marco permitirá organizar las colecciones permanentes y las exposiciones temporales con "mayor flexibilidad".
Esta reforma "técnico-administrativa", según Zugaza, se enmarca dentro de la ampliación del Museo, que a principios del próximo año y tras cuatro años de trabajos, duplicará la superficie de la pinacoteca.
El arquitecto español Rafael Moneo, autor del Museo Romano de Mérida (Extremadura) y de la rehabilitación del Museo Thyssen de Madrid, es el encargado de la ampliación del Prado y cuenta con un presupuesto de 42.6 millones de euros (48 millones 120 mil dólares).
El punto más polémico de los trabajos fue la inclusión de la Iglesia de los Jerónimos (s. XVI) en el ámbito del Museo, en especial la habilitación de su claustro como zona de lectura y espacio para esculturas.
Para los vecinos del Barrio de los Jerónimos el proyecto de Moneo no respetaba la integridad del claustro, monumento nacional desde 1925, por lo que pedían la paralización de las obras.
La inconformidad vecinal llegó hasta el Tribunal Supremo que estableció por fin que los trabajos favorecían la conservación del claustro, y no su deterioro como denunciaban los vecinos.