El recinto de Quetzalcóatl fue sometido a trabajos de mejoramiento
NOTIMEX
MÉXICO, DF.- La fachada principal del Templo de Quetzalcóatl, ubicado en la Zona Arqueológica de Teotihuacán, ha sido remodelado por estudiosos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), al igual que los pisos prehispánicos y el drenaje original del mismo recinto.
Esta acción se realiza con el propósito de controlar la humedad provocada por las lluvias y las filtraciones, en el edificio conocido como el ?Templo de Quetzalcóatl", además de evitar el desmoronamiento y pérdida de material de la fachada.
Para ello, el INAH realiza un plan integral emergente, a través del Proyecto de Investigación y Conservación del Templo de la Serpiente Emplumada, dirigido por los arqueólogos Sergio Gómez y Alejandro Sarabia; así como por el restaurador Rogelio Rivero Chong.
En un comunicado, el INAH asegura que el Proyecto se encuentra en su primer temporada de trabajo, iniciada en julio y se espera concluir en diciembre; cuyos objetivos: rehabilitar el sistema de drenaje original, a partir del canal principal.
Este último, corre unos 400 metros, desde el centro de la plaza con dirección al norte, hasta desembocar en el río San Juan. También se trabaja en los pozos de exploración para detectar los canales secundarios que forman la red de drenaje y desague, de no encontrarse éstos, se crearán nuevos canales que ayuden a liberar el agua de la zona.
Otro de los trabajos tiene que ver con el análisis de los pisos prehispánicos, que serán repuestos con materiales similares a los originales a base de cal, arena y arcillas.
?Los objetivos principales de este proyecto son eliminar las causas principales de deterioro de la fachada principal del Templo Quetzalcóatl, originadas por la humedad y las sales del cemento, que producen salitre, aunado al intemperismo??, se señala en el comunicado.
Este año se rehabilita parte del drenaje, que se intentará conectar con el lado norte de la Ciudadela para liberar parte de las filtraciones que se producen, de acuerdo con Julie Gazzola, arqueóloga que realiza los trabajos de campo y excavaciones de los pisos del lado norte del Templo.
En lo que van de las excavaciones, se han localizado, en la parte central del canal, fragmentos de osamentas desmembradas y mutiladas, acompañadas de material cerámico, por lo que una de las hipótesis es que se ofrecieron ofrendas para celebrar su clausura.
La parte del canal que se encuentra dentro de la Ciudadela fue detectado hace 20 años por el arqueólogo Rubén Cebrera, pero no se había liberado, ya que la conservación del templo siempre fue correctiva no preventiva, como en esta ocasión.
El drenaje original del Templo de Quetzalcóatl data del año 300 d.C. y fue clausurado con ofrendas humanas por los mismos teotihuacanos, poco después de su construcción, por alguna razón que aún no se determina.
En cuanto a la fachada, se realizan trabajos de conservación preventiva para evitar la pérdida de fragmentos que tienden a desprenderse. Por ello, se aseguran con velados y pastas a base de morteros de cal, que son de una dureza similar a los materiales originales, también se eliminan intervenciones anteriores, como el uso de cemento, una fuente más del deterioro del edificio.
La desintegración granular, caída de fragmentos, fisuras, grietas y pérdida de estuco, son los principales daños que los restauradores controlan, luego de la limpieza en seco y húmedo y la liberación de cemento, para reponer con pastas de ?sacrificio?? hechas con cal de piedra y arena de río. Para eliminar la mayor cantidad de agua y sal al interior del edificio, se realizarán pozos de exploración en las entrecalles para determinar el contenido salino que existe en los rellenos, explicaron los encargados del proyecto.
Agregaron que con esta intervención emergente se realizará un diagnóstico del estado de conservación y una evaluación de las pastas de sacrificio.