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Jerusalén.- El primer ministro designado palestino, Abú Mazen, amenazó abstenerse de asumir el cargo debido a las maniobras del presidente de la Autoridad Palestina, Yasser Arafat, para bloquear su gabinete ministerial.
Mazen se retiró intempestivamente anoche de una reunión del Comité Central de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en Ramalá en vista de la renuencia de Arafat a aceptar su equipo, en particular su nominado ministro a cargo de la seguridad, Mohamed Dahlan.
El coronel Dahlán considera la “Intifada” o alzamiento contra los israelíes un error histórico que no sirve a la causa palestina, en lo que coincide Abú Mazen.
Arafat a su vez quiere que la responsabilidad de los asuntos de seguridad quede en manos del actual ministro del Interior, Hani el Hasán, quien es uno de sus incondicionales.
Fuentes palestinas dijeron que ayer se reanudarían las conversaciones entre Arafat y Mazen. No está claro si las pláticas tendrían lugar en un encuentro privado o en una nueva reunión del Comité Central de la OLP.
Hasta ahora, Arafat parece tener la ventaja en la disputa en torno al nombramiento de Dahlan.
Funcionarios estadounidenses han transmitido mensajes a Abú Mazen en días recientes, urgiéndolo a resistir la presión de Arafat en lo relativo al nuevo gabinete, y subrayando que el primer ministro debe aprovechar el amplio respaldo internacional del que ahora goza.
Pese a las disputas, se espera que la composición del nuevo gabinete palestino sea anunciada en los próximos días.
El gobierno de Estados Unidos espera la presentación del gabinete para hacer público su “mapa de rutas”, como denomina su más reciente plan para la solución del conflicto palestino-israelí.