TORREÓN, COAH.- Una mujer que nos dejó su mejor legado en sus composiciones, María Grever, será recordada en un réquiem preparado por alumnos del Tecnológico de Monterrey, Campus Laguna. El homenaje tendrá como sede el Teatro de Gómez Palacio Alberto M. Alvarado, el próximo dos de octubre, en funciones de 18:00 y 20:30 horas, con entrada libre.
Grever será interpretada por la actriz Ofelia Medina, reconocida por su amplia trayectoria en cine, teatro, televisión y radio, y por su labor humanista en defensa de las poblaciones indígenas de México.
La primera actriz estará acompañada en el escenario, por alumnos del Tecnológico de Monterrey, Campus Laguna , quienes ya ensayan para dar vida a los personajes que vivieron con María sus amores, desalientos y frustraciones.
Los jóvenes actores son dirigidos por María Cristina García; mientras que la dirección vocal y musical está a cargo de Enrique Martínez y Roberto Guzmán; y Guillermo Martínez, respectivamente.
Los participantes interpretarán en vivo las canciones que le dieron fama a esta compositora; y otros narrarán su vida.
La actividad cultural es preparada por el departamento de Difusión Cultural del Tec de Monterrey, cuyo propósito es ofrecer un espectáculo de esta naturaleza cada semestre, con la participación de un actor o actriz invitada, en este caso, Ofelia Medina. Ahora, en el marco de los festejos del 60 aniversario del plantel educativo y como parte del Programa Cultural “Tec 60’’.
La madona de la canción
Joaquina de la Portilla Torres falleció el 15 de diciembre de 1952, en la ciudad de Nueva York. Quizá ese nombre diga poco a quienes han escuchado a una de las compositoras mexicanas más populares de todos los tiempos: María Grever, autora de piezas clásicas en el mundo entero, como Júrame, Cuando Vuelva a tu Lado, Alma Mía, Bésame y Vida Mía, entre otras más.
María Grever nació en la Hacienda de Otates, ubicada en León, Gto., el 16 de agosto de 1892; a los seis años de edad marchó a Sevilla, España, de donde era originario su padre, Francisco de la Portilla; mientras que su madre, Julia Torres, mexicana de nacimiento, tenía origen hispano.
Se casó con León A. Grever, de quien tomó el apellido para inmortalizarse como la gran compositora que es. María alcanzaba un éxito tras otro, con obras como Una Rosa, un Beso; Lamento Gitano; Cuando Vuelva a tu Lado; Tipitín; Dame tu Amor, ¿Quién eres tú?; Saudades, y muchas más. Pero no sólo en la canción popular fue grande, ya que según el descubrimiento de Nayeli Nesme señala que María Grever fue alumna de Claude Debussy, y que musicalizó varias películas para la 20th Century Fox y la Paramount Pintures.
De ella se ha señalado que su estilo romántico y elegante marcó pauta en el bolero. La intensidad con la que vivió, a la postre, determinó su final.
Sánchez García cuenta que al escuchar la interpretación de Néstor Cháirez de su canción Vida Mía, en el Carnegie Hall, en 1948, se emocionó tanto que le provocó una hemorragia cerebral que devino en parálisis del lado izquierdo. No obstante, Grever siguió su vida, en 1949 vino a México a realizar una serie de conciertos.
El Ayuntamiento de la ciudad le otorgó la medalla al mérito civil, a una mujer maravillosa, que venía a su país, paralítica. En noviembre de hace medio siglo fue intervenida quirúrgicamente para extirparle numerosos cálculos biliares, pero a los cinco días entró en agonía y falleció el 15 de diciembre. Nueve días después, el 24, en su patria, fue sepultada en el panteón Español.
Ofelia Medina será Grever
Nació en Mérida, Yuc., un cuatro de marzo. Ahí vive hasta el término de sus estudios de secundaria, mudándose después con su familia al Distrito Federal. Desde entonces su inquietud por entrar al medio artístico es ya evidente, al igual que su deseo por mejorar las condiciones sociales.
Sus estudios en la danza reafirman su interés por pertenecer al mundo artístico, oportunidad que se presenta al conocer al director de teatro Alejandro Jodorowski, con quien funda el primer grupo de Pantomina Infantil de México.
Su carrera en el teatro se inicia entonces, en el año 1967, en el Teatro Antonio Casoallá de Tlatelolco con el espectáculo H3O del mismo Jodorowsky.
Ofelia hace su debut en el cine con la película ¿Pax?, realizada con motivo de la celebración de los Juegos Olimpicos del 68. Su primer protágonico lo realiza en 1969 en la película Patsy, mi amor. Ese mismo año también debuta en la televisión en la serie Landrú.
La década de los 80’s constituye su consolidación como una de la mejores actrices, de talla mundial. En 1985 es premiada con la Diosa de Plata a la mejor actuación femenina por su interpretación de Frida Khalo. Por su labor en el cine, ha sido galardonada con numerosos premios tanto en México, como en el extranjero.
En nuestro país ha recibido Arieles y Diosas de Plata, por Paraíso (1970) y Frida, Naturaleza Viva (1985); con esta última también obtiene reconocimientos en La Habana, Cuba, en Alemania, Colombia, Turquía y otros países. Al parecer, estuvo considerada para competir por el Óscar como mejor película extranjera.
En teatro, hasta la fecha ha trabajado en por lo menos 30 obras. En televisión hace su debut al lado de Ernesto Alonso, quien la llama para participar en la serie Landrú. Su primer protágonico lo realiza en Lucía Sombra, donde interpreta una invidente.
En los últimos diez años se ha dedicado más a su labor humanista para mejorar las condiciones de vida de las poblaciones indígenas, específicamente a través del Fidecomiso para La Salud de los Niños Indígenas de México (FISANIM) creado por ella misma, el pintor Francisco Toledo y al doctor Juan Pérez Amor.