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MÉXICO, DF.- Las Fuerzas Armadas de México son fuerzas de paz y solidaridad, y constituyen un sólido frente en el combate al crimen organizado, aseguró el Presidente Vicente Fox, al encabezar la ceremonia del 86 aniversario de la creación de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM).
En la base aérea de Santa Lucía, en el estado de México, al hablar sobre la lealtad y sus valores de los militares que integran esta rama del Ejército, recordó que con la colaboración de la FAM, la Secretaría de la Defensa destruyó una superficie superior a las 37 mil hectáreas sembradas con amapola y marihuana, así como 781 pistas clandestinas de aterrizaje y 269 campamentos de narcotraficantes construidos para vigilar las zonas de cultivo y producción de droga.
Señaló, citando cifras de la Sedena, que la acción de los militares en la lucha contra el narcotráfico se tradujo también en la captura y consignación de casi dos mil personas vinculadas a esta actividad ilícita.
En el acto, el presidente Fox también se dio tiempo para hablar sobre problemas del campo mexicano y aseguró que el gobierno federal “tiene la voluntad para abrir de par en par las puertas al diálogo”, reconociendo además que la situación del agro “es difícil”.
Por su parte, el comandante de la Región Aérea del Centro de la FAM, Hernán González, indicó que la Presidencia de la República ha impulsado, de acuerdo con las posibilidades económicas de la nación, la modernización del material, equipo e instalaciones aéreas y la preparación profesional de las tripulaciones de vuelo.
Agradecimiento
El presidente Vicente Fox Quesada agradeció al Ejército y Fuerza Aérea Mexicana su actuación en apoyo a las poblaciones del país que han sido afectadas por los huracanes y sismos de los últimos meses y aseguró que “nunca habíamos actuado con tal rapidez, como lo hemos venido haciendo en estos desastres que se han presentado recientemente”.
En este contesto, indicó que tras reciente visita a Colima -hace tres semanas-, constató que “prácticamente están resueltos todos los problemas de la emergencia, pero además, está resuelta toda la construcción de mediano y largo plazo.
El pueblo de México siente una enorme gratitud hacia ustedes por el transporte aéreo de víveres, medicinas, agua y vestido a todas las familias afectadas por los huracanes Isidore y Kenna, por el sismo en Colima, “aún en situaciones difíciles, donde su integridad física estaba en peligro, ustedes sirvieron sin vacilar con solidaridad y entrega a nuestro país”.
Ante los soldados del aire, al alto mando del Ejército y la Fuerza Aérea y miembros de su gabinete, el presidente de la república afirmó que con el apoyo de los pilotos militares, la Secretaría de la Defensa Nacional destruyó más de 37 mil hectáreas de plantíos ilegales, así como 781 pistas clandestinas de aterrizaje y 269 campamentos de narcotraficantes.
Esto se tradujo, añadió, en la consignación de casi dos mil personas por presuntos delitos contra la salud y portación ilegal de armas de fuego.
El gran avance que ha tenido nuestro gobierno en el combate al tráfico ilícito de drogas, “se debe en gran parte a ustedes”, dijo a los pilotos reunidos en el hangar de los aviones F-5 en el que se sirvió un desayuno en honor del comandante supremo de las fuerzas armadas, porque “aún en los territorios agrestes y de más difícil acceso han cerrado el paso y han combatido el narcotráfico en el espacio aéreo nacional.
En cada uno de los frentes en los que sirvieron, dejaron constancia de que sus principios supremos de honor, valor y lealtad están al servicio del país.
Por su parte, el general de división piloto aviador, Hernán González Buenfil señaló que “hoy, al igual que en el pasado”, los integrantes de la Fuerza Aérea se preparan “ardua y cotidianamente”, para enfrentar los retos actuales.
Recordó la épica participación de los “soldados del aire” en el Escuadrón 2001 en el teatro de operaciones del Pacífico durante la segunda guerra mundial, cuando “al llamado de la nación”, sus integrantes no dudaron en representar a las armas nacionales en el bando aliado -con Estados Unidos a la cabeza-, “ofrendando lo mejor de sí en aras del interés nacional, de la solidaridad y la libertad en el mundo”.
En la ceremonia en la que no se hizo ningún anuncio espectacular sobre la modernización de la flota aérea, González Buenfil dijo estar convencido que sólo con una fuerza aérea profesional, con habilidades técnicas superiores y valores éticos bien cimentados, puede aspirar a desempeñar bien su función de defensa y garante de la soberanía nacional.