Reuters
NUEVA YORK, EU.- La ONU levantó ayer las sanciones contra Libia, resultado del atentado contra el vuelo 103 de Pan Am sobre Lockerbie, Escocia, hace quince años, lo que hace posible la liberación de un fondo de compensación por 2,700 millones de dólares a los familiares de las 270 víctimas.
Francia y Estados Unidos, que tienen sus propias sanciones contra Libia incluida la prohibición norteamericana de compras de crudo libio, se abstuvieron en la votación de trece a cero en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
La aprobación del levantamiento de las sanciones de la ONU quedó asegurada el jueves, cuando Francia anunció que retiraba su amenaza de veto tras lograr los familiares de las víctimas de otro atentado contra un avión francés la promesa de Trípoli de compensaciones adicionales.
El embajador británico Emyr Jones Parry dijo que el atentado de 1988 con explosivos que derribó el avión de Pan Am sobre la localidad escocesa de Lockerbie fue “el peor caso de terrorismo en territorio del Reino Unido”.
Pero, el viceembajador norteamericano James Cunningham advirtió que la votación no debía ser tomada por Libia o por otros países como “una aceptación tácita de Estados Unidos de que el gobierno de Libia se ha rehabilitado”.
“Estados Unidos sigue teniendo serias preocupaciones por otros aspectos de la conducta libia, incluidos sus pobres antecedentes en derechos humanos, su rechazo de normas y estándares democráticos, su irresponsable conducta en África, su historial de vinculación con el terrorismo y lo que es más importante, su búsqueda de armas de exterminio y sus métodos de envío”, dijo Cunningham.
Sin embargo, Libia acogió la decisión del Consejo de Seguridad ayer como una “victoria” y la apertura de una “nueva página” en su campaña por normalizar sus relaciones con Occidente, según la radio estatal libia.