SUN-AEE
AUSTIN, Texas.- El presidente Vicente Fox y el gobernador de Texas, Rick Perry, expresaron sus diferencias de fondo en temas como la migración, pena de muerte y sobre el pago del adeudo de agua que México tiene con Estados Unidos.
Luego de un encuentro de más de una hora en el Capitolio de la ciudad, buscaron conciliar posiciones sobre estos asuntos, sin más acuerdos que continuar sus discusiones más adelante. Pero fue en el tema de la pena de muerte donde Perry fue tajante al señalar que esta medida no variará, que es un mandato de ley y que, pese a que el presidente Fox tiene una opinión contraria a este castigo, en Texas se aplicará la pena capital a quien llegue al estado, asesine un policía o a cualquier ciudadano.
Fox también trató de convencer al gobernador Perry para que en el estado fuera aceptada la matrícula consular como un instrumento de identificación, sin embargo el mandatario estatal le expresó sus reservas y consideró que no cumple con los estándares que garanticen la identificación real de su portador.
“Uno de los asuntos que enfrentamos como país fue el golpe frontal del 11 de septiembre de 2001, y por eso se necesita tener la documentación adecuada que permita identificar individuos que entran a Estados Unidos”, refutó Perry en conferencia de prensa conjunta con el presidente Fox, en la que quedaron de manifiesto las diferencias sobre temas torales de la relación.
Y aunque explicó que la matrícula consular es perfectible, ante Perry el presidente Fox aseguró que los mexicanos no son terroristas y sí gente de bien y que contribuyen al desarrollo de Texas y de Estados Unidos. “Por esto queremos separar, identificar y entregar esta matrícula consular a los mexicanos, porque sabemos que no son terroristas, que son gente de trabajo, gente honesta y diligente”, dijo Fox sobre este documento, el cual ya fueron entregados en mayo casi 400 mil (un millón 40 mil en el 2002) y que es aceptado en 14 estados de la Unión Americana, 122 instituciones financieras y 908 departamentos de policía.
A pesar de que en la rueda de prensa las expresiones tanto de Fox como de Perry se dieron en términos de cortesía, las respuestas sobre temas centrales -entre éstos, migración, pena de muerte y agua- fueron directas, en sentido contrario y con criterios confrontados.
Deuda liquida
Fue en el tema del agua donde el gobernador Perry fue más directo, pues aseguró que México no ha incumplido ni en tiempo ni en forma con las entregas del líquido al estado. "No es diferente a como si yo le hubiera pedido prestado unos dólares a mi amigo el presidente Fox y le dijera que le iba a pagar, pero hubiera tenido un poco de mala suerte, por así decirlo. Yo entiendo eso y él también y por supuesto espera que le pague lo que le debo, aunque quizá no el tiempo que acordamos. Obviamente, ya estamos fuera de los límites del tratado, por lo tanto, Estados Unidos está siendo flexible en este asunto", ilustró Perry con este ejemplo el problema del adeudo
Fox buscó defenderse al asegurar que en lo que va de su gobierno México está cumpliendo con sus compromisos, incluso con un poco más de lo comprometido, aunque sí reconoció que los anteriores gobiernos federales dejaron un rezago que se pretende cubrir, y que para ello se evaluarán, de esta fecha y hasta diciembre, los mecanismos para resolver el diferendo.