Washington, (EFE).- Un alto porcentaje de los conductores de EEUU realizan diversas actividades cuando están frente al volante, lo que representa un riesgo para ellos así como para otras personas, revela un estudio.
El informe de la Universidad de Carolina del Norte cuenta con la peculiaridad de que por primera vez se usaron cámaras de vídeo para filmar los hábitos de las personas mientras conducen.
En las grabaciones se detectaron sus principales distracciones, tales como hablar por teléfono celular, manipular la radio, comer, beber, afeitarse, maquillarse o leer el diario y la correspondencia.
Los expertos que realizaron la investigación entre 70 chóferes por encargo del club automovilístico AAA, observaron durante un período de tres horas una variedad de condiciones que distraen a los conductores.
A los participantes en esta investigación se les dijo que las cámaras de vídeo habían sido colocadas en el interior de sus automóviles para poder determinar los efectos, en su conducta, de las condiciones del tráfico y de las carreteras.
El estudio señaló que todos los chóferes que fueron observados se distrajeron del volante durante más del 16 por ciento del tiempo que estuvieron en el interior.
Entre las cosas que los mantuvieron despreocupados del volante, no figuró su conversación con sus acompañantes.
"Con frecuencia las personas desestiman la gravedad de las distracciones porque no todas terminan en accidentes", dijo Peter Kissinger, que preside la fundación de seguridad del transporte del club automovilístico AAA.
Sin embargo, señaló que la situación puede ser catastrófica si el despiste ocurre cuando otro automovilista hace una maniobra repentina.
Alrededor del 25 por ciento de todos los accidentes de tráfico son causados por la distracción de los conductores, de acuerdo a las estadísticas de las autoridades de seguridad en las carreteras.
Cerca de una tercera parte de aquellos que tomaron parte en el estudio publicado hablaron por teléfono celular mientras estaban frente al volante, pero en el 25 por ciento de las ocasiones usaron el aparato cuando el vehículo estaba detenido.
Casi todos los conductores manipularon el control de la radio durante su travesía, mientras que el 71 por ciento comió o bebió; la mitad de ellos se arregló el cabello, usó mondadientes, e incluso se afeitó, y el 40 por ciento leyó diarios y correspondencia.
Los investigadores dijeron que los conductores que llevan muchos años al volante fueron los que menos se distrajeron.