Reuters
JERUSALÉN.- El primer ministro israelí, Ariel Sharon, sostuvo ayer conversaciones con su contraparte palestino, Mahmoud Abbas, y le demandó el inicio de acciones contra los militantes como lo establece el plan de paz respaldado por Estados Unidos.
Sharon también renovó una oferta para retirar las tropas israelíes de partes de la Franja de Gaza y Cisjordania, donde las fuerzas de seguridad palestinas asumirían el control y detendrían a los militantes, si los palestinos aceptan los términos.
"El primer ministro demandó que su colega palestino adopte una acción vigorosa para detener el terrorismo y medidas prácticas sobre el terreno", dijo la oficina de Sharon en un comunicado tras la reunión de dos horas y media en Jerusalén.
Esas medidas incluirían el "desmantelamiento de organizaciones terroristas, el arresto de terroristas y la confiscación de armas ilegales", agregó.
El documento dijo que la reunión se realizó en una "atmósfera positiva".
Por su parte, la oficina del primer ministro palestino dijo en una declaración que el encuentro en Jerusalén "fue serio, cándido y beneficioso".
"El momento es apropiado para que palestinos e israelíes aprovechen la oportunidad hacia la paz después que ambas partes han aceptado el Mapa de Ruta", dijo la declaración en referencia al plan propuesto por Estados Unidos, Rusia, la Unión Europea y las Naciones Unidas -el llamado "Cuarteto Internacional"- que llevaría a la creación de un Estado palestino.
Las conversaciones de ayer estuvieron dirigidas a preparar el terreno para una cumbre tripartita con el presidente estadounidense, George W. Bush, prevista para el cuatro de junio en Jordania y que se espera que ponga en marcha el plan de paz.
La oficina de Sharon dijo que el líder israelí había ofrecido una serie de gestos, incluyendo una revisión de los prisioneros palestinos que podrían ser liberados y la liberación de palestinos detenidos sin cargos.
Israel también emitiría hasta 25 mil permisos de trabajo para los palestinos y que ocho mil de esos trabajadores podrían permanecer durante la noche en Israel, agregó. Tal forma de trabajo en Israel significaría un importante flujo de dinero para la economía palestina.
El comunicado dijo que Israel aumentaría el monto de los ingresos de impuestos transferidos cada mes a los palestinos.
Algunos de esos fondos han estado congelados desde que comenzó el levantamiento palestino por la independencia en septiembre del 2000.
ABU MAZEN, MINISTRO PALESTINO
En una entrevista al diario israelí Yediot Ajronot, previa a la reunión con Sharon, Mazen declaró:
* Haber logrado una tregua con las organizaciones extremistas.
*Hará que su viceministro de Interior, Mohamed Dajlán, presente un plan operativo para actuar policialmente contra aquellos que no respeten el alto el fuego.
*Que presentaría una larga lista de peticiones ante Sharon, argumentando que la mejor forma de eclipsar a Yasser Arafat es mostrar a la calle que puede presentar resultados, algo que el presidente no consiguió.
*Solicitar que el Gobierno israelí haga una declaración pública de aceptación del futuro Estado palestino, que trascienda el mero compromiso adquirido ya tras haber aprobado el plan de paz del Cuarteto.
*Poner fin a las incursiones de castigo y a los asesinatos selectivos, que ponga en libertad a un contingente importante de presos de la Intifada (entre ellos varios dirigentes políticos) y congelar totalmente la expansión de las colonias y desmantele aquellos embriones de asentamiento creados a partir de marzo del 2001 (tal como especifica el articulado del Mapa de Ruta).
*Énfasis en la necesidad de levantar el asedio a los territorios autónomos, suavizar los controles militares y permitir que un cupo de jornaleros vuelva a trabajar legalmente en Israel, para así recuperar la normalidad y reactivar la maltrecha economía.
ARIEL SHARON, PRIMER MINISTRO ISRAELÍ
El primer ministro israelí no cuenta con el consenso del Gabinete, lo que realza el valor de que lograra aprobar un texto que llama, por primera vez, a la creación de un Estado palestino:
*Y precisamente por esta razón, se resistirá a tener que pedir a sus ministros que aprueben una segunda declaración en la que se formule explícitamente este llamamiento, que sin duda provocaría una crisis no sólo dentro del Ejecutivo, sino dentro de su propio partido, el Likud. Para Sharon, la tregua que pretende establecer su homólogo palestino es insuficiente, por no decir inaceptable.
*El mandatario israelí quiere que las fuerzas de seguridad palestinas pongan en marcha una cadena de detenciones de sospechosos, procesos judiciales y encarcelamiento de supuestos terroristas.
*Que se confisquen todas las armas ilegales y que éstas sean transferidas a una tercera parte -con toda seguridad, a Estados Unidos- para su destrucción, y que se renuncie a su contrabando.
*Que se ponga fin a la incitación a la violencia, tanto en el sistema educativo como en los medios de comunicación.
FUENTE: El País