TORREÓN, COAH.- Las más de 500 denuncias por daños culposos —afectados en accidentes automovilísticos—, presentadas en lo que ha transcurrido del presente año y de las cuales, la gran mayoría no se ha resuelto, exhiben las deficiencias del sistema penal para este tipo de asuntos y el elevado número de vehículos que circulan sin control alguno.
El Siglo de Torreón tuvo conocimiento que en la Procuraduría General de Justicia en el Estado, (PGJE), delegación Laguna, durante el mes de agosto se presentaron 60 denuncias por parte de automovilistas que resultaron afectados en accidentes y en el año, 239 casos fueron turnados al Ministerio Público, pues los participantes no llegaron a ningún acuerdo al momento de la colisión.
Tales cifras demuestran la incidencia exagerada en daños culposos, delitos que definitivamente se persiguen por querella, denuncias que deben presentar los propietarios del auto dañado o bien el representante legal y no por oficio, se explicó en la dependencia judicial.
Cuando en un accidente, las partes no llegan a ningún acuerdo, el asunto se turna al Ministerio Público para que esta instancia resuelva según las pretensiones de los ofendidos, pues algo común es que los participantes aleguen que la luz verde del semáforo les favorecía.
La autoridad pide en depósito cierta garantía para regresar el vehículo, cuando éste fue llevado al corralón, sin embargo no resuelve la pretensión del verdaderamente ofendido, pues muchas personas aunque sean responsables, se niegan a pagar, se explicó en la Procuraduría.
A pesar del depósito de la garantía, la indagatoria continúa y el expediente pasa al Ministerio Público adscrito a los juzgados penales donde se decide si se da la reparación del daño o bien la penalidad, lo que tarda más de un año y así se refleja en asuntos pendientes por resolver, reconocieron en la dependencia judicial.
Urgen reformas legislativas
En opinión de Alejandro Ramírez Adame, abogado penalista, urgen reformas para este tipo de asuntos, pues la gran mayoría de los casos que se atienden en la PGJE, no han sido resueltos y un elevado número de afectados sigue en espera de que les paguen por el daño ocasionado.
Personas que han resultado afectadas, observan el tiempo que transcurre y no ven el pago causado a su patrimonio, debido a lo burocrático que resulta llevar estos asuntos para los cuales, la misma Ley impide una resolución rápida.
En muchos casos, la parte afectada termina por digerir el perjuicio y dejar de acudir a la dependencia judicial para exigir justicia, concluyó.
Muchos inconvenientes
De acuerdo con los procesos que se llevan dentro de la Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE), en delitos culposos, existen varios inconvenientes, principalmente que el propietario del vehículo responsable se dio a la fuga y su auto no representa ninguna garantía, pues el costo es menor al daño ocasionado.
Otro inconveniente es que el auto responsable no trae placas y cuando difícilmente se localiza al propietario, éste asegura que quien conducía la unidad en el momento del choque era otra persona la que manejaba, de ahí que la indagatoria se complica.
En otros casos se asegura que el propietario se fue a otro Estado o bien al vecino país, los procesos se alargan debido a las lagunas y salidas permitidas por la misma Ley y el caso queda impune.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón