EFE
BERLÍN, ALEMANIA.- Richard Gere, que ha tenido ocasión de poner a prueba sus dotes para el claqué en el musical Chicago, de Rob Marshall, se jacta además de su habilidad con el piano, como ha podido comprobar, solamente, el personal de la limpieza.
"A mis conciertos tienen acceso únicamente las mujeres de la limpieza", declara Gere en una entrevista que publica la revista femenina alemana Bild der Frau.
La explicación de tal restricción al público se debe a que el actor suele tocar el piano para relajarse cuando está en la intimidad en una habitación de hotel, mientras está de viaje.
Actualmente Richard Gere promociona su cinta Chicago la cual ha sido elogiada por la prensa extranjera de Hollywood que ha sido la primera en pronunciarse a su favor y le otorgó el Globo de Oro como Mejor Película de Comedia o Musical y además premió la calidad de su estrella, Richard Gere, como el Mejor Actor de Comedia o Musical.
Este papel le viene como anillo al dedo a Gere, quien explota esa buena presencia que se ha incrementado con los años para dar vida al inescrupuloso Billy Flynn, demostrando además sus habilidades en el canto y el baile, particularmente con una rutina de tap.
Chicago está basado en la obra de Maurine Watkins que Bob Fosse, John Kander y Fred Ebb transformaron en un alegre musical de Broadway, que cuenta la historia verídica de una mujer casada que asesina a su amante.
Una parte del público no relaciona a Gere en principio con los musicales, pero su vida ha estado ligada a la música; desde jovencito toca varios instrumentos -entre ellos el piano- y aunque no recuerda cuál fue el primer musical que vio en su vida, sí participó en El Rey y Yo, que fue su primera experiencia en teatro musical, en la secundaria.
De ahí fue atrapado por la actuación y al inicio de su carrera abundaron los musicales -incluyendo Vaselina en teatro-, aunque el público lo recuerda a partir de películas como Buscando a Mr. Goodbar y Days of Heaven.
Gere es de esas personas a las que resulta agradable escuchar porque siempre parece seguro de su encanto. Con el pelo completamente blanco y vestido de colores neutros, con saco color camello, camisa beige sin corbata y pantalón café, luce como un hombre satisfecho con la vida.
Así que cuando se describe inseguro es difícil creerle. "Para mí está bien ser inseguro, porque quieres estar disponible. Lo infortunado es cuando la inseguridad te hace detenerte, uno pone muchas barreras porque eso significa ser frágil, pero una actriz como Renée, que es muy frágil, ahí tiene su poder, en que es abierta y frágil".
Casado hace meses con Carey Lowell, su compañera de hace años y madre de su hijo Homer, Gere dice que es muy bueno para reír, por lo pronto con la prensa lo hace seguido.
Budista desde hace muchos años, el actor no encuentra ninguna contradicción entre su vida glamorosa como estrella y la filosofía del budismo porque cualquier espiritualidad, dice, trata de encontrar la verdad y la verdad está en cualquier parte.
Precisamente su formación lo hace contrario a la posibilidad de guerra contra Iraq .
"La violencia genera siempre más violencia. Al Presidente le diría eso. No hay necesidad de que Estados Unidos haga movimientos violentos, no tiene sentido moral o militar".
Sus creencias lo hacen desinteresarse en la política y asegura que él jamás contendería para un puesto de elección popular porque su temperamento no se lo permite. En cambio, auspicia la Fundación Gere que contribuye a proyectos de educación, salud y derechos humanos y que busca llamar la atención hacia el Tibet y su cultura en peligro de extinción.
Que si ya no trabajaría con Julia Roberts, que si le gusta tocar el piano a medianoche en los hoteles donde se hospeda o que si está por sacar un nuevo libro de fotografías, para todo tiene respuesta y sonrisas.
"Sí y no trabajaría con ella porque siempre hay mucho alboroto alrededor y eso distrae del trabajo. Era más divertido antes, cuando hicimos Mujer Bonita no había expectativas y simplemente trabajamos, pero ella es magnífica".
En cuanto al piano lo toca cuando viaja y sólo si le pega el "jet-lag" y no puede dormir; busca entonces un piano en el hotel, la condición es que sólo el personal de intendencia puede escucharlo.
"Amo tomar fotografías, lo hago desde que tenía ocho años", y explica que su nuevo libro tendrá fotos diferentes, ya no del Tibet, aunque prefiere no comentarlo hasta que salga.
Ni hablar de sus fracasos, a estas alturas de la vida dice que ya no le duelen porque ya aprendió que a veces se triunfa y a veces no.
Por lo pronto, Chicago le está dando muchas satisfacciones y él las está disfrutando plenamente.
Sabía que...
En Chicago, la nueva cinta de Richard Gere hay muchas curiosidades que cualquier cinéfilo debe saber:
-Chita Rivera, quien interpretó a Velma Kelly en el montaje original de Broadway en 1975, aparece brevemente como la presa que da la bienvenida a Roxie Hart.
-El actor Taye Diggs, quien aparece en la cinta como el conductor de la banda, participó también en la puesta en escena de Chicago en Broadway.
-La cinta se convertirá en los próximos días en el primer musical en rebasar los 100 millones de dólares en taquilla en Estados Unidos desde que Vaselina lo hizo en 1978.
-Chicago es el musical más taquillero de los últimos 20 años, le siguen La Mejor Casita del Placer (1982), Moulin Rouge: Amor en Rojo (2001), Anita La Huerfanita (1982) y Evita (1996).
-Si se toma en cuenta la inflación el musical más exitoso de la historia es La Novicia Rebelde (1965), cuyos 158.6 millones de dólares recaudados equivaldrían a 833.1 millones de dólares de hoy en día.
-El número de nominaciones al Oscar de Chicago es un récord para un musical, compartido con Mary Poppins (1964).
-De ganar mejor película, Chicago sería el noveno musical en ganar el premio en esta categoría, los anteriores son: Oliver (1968), La Novicia Rebelde (1965), Mi Bella Dama (1964), Amor sin Barreras (1961), Gigi (1958), Un Americano en París (1951), The Great Ziegfield (1936) y Broadway Melody (1928-29).
-La cinta tiene homenajes a Marilyn Monroe y a la película Cabaret, cuya música fue también compuesta por John Kander y Fred Ebb, compositores de Chicago.
FUENTE: Agencias.