11 octubre 2003
AGUASCALIENTES, Ags., (SUN-AEE).- La gobernabilidad en nueve estados se encuentra en riesgo por la escasez creciente de agua, por lo que de continuar la tendencia se frenará el desarrollo económico y se acentuará la expulsión de habitantes y la propensión a padecer desastres naturales devastadores.
En la cuenca Lerma-Chapala-Santiago son cada vez más las ciudades que padecen déficits de agua, pero sus autoridades se acostumbran a aprobar "importaciones" del recurso, cada vez más caro para las arcas municipales, sin que nadie se atreva a ponerle precio real.
Los cauces contaminados del agua que corren por el Lerma entran al lago de Chapala y siguen al Pacífico por el Santiago, y cada vez se contaminan más al punto de que afectan ya la operación de las presas hidroeléctricas, señalaron aquí autoridades estatales y municipales.
El secretario de Gobernación, Santiago Creel, quien encabezó una reunión de análisis del problema que vulnera la seguridad nacional, dijo que en México la disponibilidad actual de agua por persona "es aceptable", pero el riesgo de caer en grandes déficits exige que ahora se apliquen acciones eficaces para su conservación.
Creel previno que la situación afecta a 329 municipios. "Si permitimos que esta cuenca se degrade, las consecuencias para la estructura productiva y para la gobernabilidad del país serían funestas, sobre todo en nueve entidades federativas".
La labor de las autoridades de los tres órdenes de gobierno -la participación de los municipios es vital, subrayó el secretario de Gobernación- debe estar encaminada a que esto no ocurra, sino a que se asegure la sustentabilidad y el crecimiento de las distintas actividades económicas.
"Un riesgo serio es que México se convierta en un país con grandes déficits de agua, lo que tornaría muy vulnerable a nuestra economía". Y agregó: "Ante la escasez, el manejo integral del agua nos debe hacer fuertes." Los estados que pertenecen a la cuenca son México, Michoacán, Guanajuato, Querétaro, Jalisco, Nayarit, Zacatecas, Aguascalientes, Durango.
El gobernador de Aguascalientes, Felipe González, se refirió a su estado, cuyo nombre rendía homenaje a los manantiales, acequias y termales; ahora Aguascalientes enfrenta los problemas de la escasez.
Enfrentar el problema colocó a la entidad en el primer lugar en saneamiento de aguas con 85% de los caudales que envía a la cuenca. "El agua, sin duda, es un asunto de Estado que compete mucho a los ciudadanos bajo la conducción de acciones por parte del gobierno", alertó.
Abordar el problema es urgente. La fórmula de los Consejos de Cuenca para la toma de decisiones es la adecuada, reconocieron los gobernadores que concurrieron al encuentro regional: de Zacatecas, Ricardo Monreal, y de Nayarit, Antonio Echevarría, así como representantes de Jalisco y Guanajuato.
Reportaron que en obras, programas, acciones para garantizar el abasto y sanear el recurso que va a los ríos y presas, en el corto plazo, absorberá inversiones por más de 10 mil millones de pesos.
Entre las medidas urgentes destaca el dejar de extraer agua del lago de Chapala, que es la fuente de abasto principal de la zona metropolitana de Guadalajara. Las lluvias del temporal, pese a su gran volumen, al descargar corrientes en su vaso, sólo lo han ocupado a la mitad.
Chapala almacena hoy 3 mil 600 millones de metros cúbicos del recurso, pero para su regeneración se necesita que deje de abastecer de agua a la zona metropolitana tapatía durante 30 años.
Para los grandes financiamientos que deben asegurarse, la Comisión Nacional del Agua (CNA), por conducto de su director, Cristóbal Jaime Jáques, ofreció su apoyo a las autoridades en los procesos de gestión de recursos.
"Los desafíos de preservar el agua son enormes", dijo el director de la Comisión Nacional del Agua (CNA) al resaltar los resultados positivos de la "gestión colectiva" del agua que se sigue en el país en siete sectores de usuarios, tanto agrícolas e industriales, como domiciliarios.
Con todo, para el 2004 es muy probable que el presupuesto de la CNA baje de 12 mil 400 millones de pesos, en este año, a 10 mil 100 millones de pesos, de acuerdo con un comentario del gobernador de Zacatecas, Ricardo Monreal, al establecer la urgencia de grandes obras hidráulicas.