Al señalar que para el PRI sería positivo establecer alianzas electorales en la contienda del 2003, pero solamente que sea para ganar, el secretario general de la Federación de Estado, CTM, José Ramírez Gamero, reiteró que el partido debe aplicar la consulta directa a la base, de lo contrario se corre el riesgo del divisionismo en caso que se pretenda regresar a las imposiciones de candidatos.
Aclaró que la alianza que al parecer habrá de establecer el PRI con el Partido Verde Ecologista de México, no será en los 300 distritos. Y que en el caso de Durango aún no había una definición al respecto en los 5 que comprende la entidad.
Solamente en el caso de una alianza con otro partido que tenga ideología similar y no antagónica a la del PRI, se podría dar la candidatura de unidad, pero no en otros casos, donde se deberá aplicar la consulta directa a los militantes y a la sociedad en general, añadió, al indicar que en caso de darse tal figura, se tendrá que tener cuidado que los abanderados cumplan con el perfil ganador.
Afirmó que en el caso del sector obrero en Durango la CTM está preparada para participar en la contienda interna para elegir a los candidatos a diputados federales por el principio de mayoría relativa en los distritos I, II, III y IV, con sus representantes José Ramón González León, Carlos Herrera Araluce, René Carreón Gómez y Ernesto Reséndiz Cisneros, respectivamente.
Dijo que al menos en estos cuatro distritos, de acuerdo a las circunstancias actuales, el partido deberá utilizar el procedimiento estatutario de la consulta directa a la base, si no quiere que haya divisionismo y que a la postre se vaya a reflejar en los votos a obtener el primer domingo de julio del 2003.
El actual diputado federal enfatizó el compromiso que hay de respetar la decisión mayoritaria de los militantes en la elección de candidatos, por lo cual reafirmó que los representantes cetemistas que participarán en la contienda interna, reúnen las características del perfil triunfador, de tal manera que el partido deberá propiciar un proceso transparente y democrático que no deje lugar a dudas sobre los resultados y al finalizar apoyar a los triunfadores.
Reiteró la postura cetemista de evitar regresar a las imposiciones ya que ello traería consigo el riesgo de las divisiones y desbandadas, por lo que manifestó confianza en que se cumplan los compromisos de elegir a los abanderados priistas a diputados federales por el principio de mayoría relativa, bajo el procedimiento de consulta directa a la base y a la sociedad civil en general.