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San Antonio, EU.- Un nuevo programa que supervisará la entrada y salida de extranjeros a Estados Unidos incrementará las diferencias que hay entre las regulaciones que se aplican a mexicanos y canadienses, advirtieron legisladores y empresarios de Texas.
El nuevo programa establece el registro en los cruces internacionales de la frontera con México la entrada y salida de cada extranjero, para que se pueda detectar y buscar a quienes se queden en territorio estadunidense una vez que venzan sus permisos y visas.
El programa Indicador Tecnológico de Visitantes e Inmigrantes a Estados Unidos (US-Visit), que comenzará a ser aplicado a partir del primero de enero próximo en las principales terminales áreas y marítimas y en el 2005 a lo largo de frontera con México.
No está contemplado para los cruces internacionales con Canadá ni para los ciudadanos de otras 23 naciones que no requieren de visa para ingresar a Estados Unidos. El US-Visit aumentará las discrepancias en el trato entre quienes ingresan por la frontera con México y la de Canadá, advirtió Mike Allen, director general de McAllen Economic Development Corporation, organismo sin fines de lucro dedicado a promover el comercio y la generación de empleos en McAllen.
Allen indicó que el programa creará un fuerte impacto negativo a la economía de la frontera, al hacer más problemáticos los cruces con medidas de seguridad extra que congestionarán los puentes internacionales. “Cualquier sistema que ellos establezcan aquí será un desastre para nuestra economía”, señaló.
El vocero del Departamento de Seguridad Interna (DHS) en Harlingen, Texas, Art Moreno, señaló que “nosotros no actuamos en forma unilateral o caprichosa”.
Moreno aseveró que las restricciones en las visas y el programa US-Visit son dos cosas completamente separadas.
Sin embargo, para algunos empresarios del sur de Texas el aumento de la seguridad acerca a ambos asuntos. Las preocupaciones de los empresarios fronterizos fueron recogidas por legisladores de Texas.
La semana pasada, el senador republicano John Cornyn y los congresistas demócratas Solomon Ortiz y Rubén Hinojosa interpusieron en el Congreso una iniciativa para eliminar las disparidades en las políticas de ingreso de mexicanos y canadienses.
Jim Williams, funcionario del DHS a cargo de establecer el programa US-Visit, reconoció en una reciente visita a Texas que la cuestión de uniformidad entre los países es “un asunto caliente”.
Williams dijo que recomendaría que los mexicanos que ya poseen visa láser sean exentos de las inspecciones requeridas en el programa, aunque no informó si apoya o pedirá que se elimine la restricción de tiempo de 72 horas en el cruce.
“Estamos muy conscientes del impacto económico de todo lo que hacemos”, afirmó el funcionario, quien apuntó que “nuestra meta es reforzar la seguridad nacional, pero también facilitar el comercio legítimo y creo que podemos hacer ambas cosas”. NTX