El 27 de junio vence el plazo para que los equipos de la Liga Mexicana de Beisbol de Verano se refuercen, si no lo hacen dentro de ese límite deberán irse el último mes de la temporada regular con los 28 peloteros que haya en el roster. Por ningún motivo, así sea lesión o enfermedad, la directiva del circuito permite movimientos después de la fecha señalada y si hablamos hoy 17, restan diez días para que Vaqueros haga cosas importantes que demuestren un verdadero deseo de trascender.
No es descabellado hablar de cinco inicialistas como Isabel Girón, Juan Jesús Álvarez, Julio César Jiménez, Federico Castañeda y Jorge Roque; si este último se ve afectado por las ampollas, ahí se tiene a Edgar Pérez como sustituto. Lo anterior se traduce en la salida de José Aníbal Reynoso que no termina de dar el estirón esperado por la directiva, con un hueco de extranjero para traer a otro bateador en apoyo de Calvin Pickering.
Por razones lógicas es de esperarse que algunos refuerzos vengan de los Cafeteros de Córdoba y en este caso qué le parecerían los nombres de Emigdio López, Héctor Chavarría y David Sinohui, como lanzadores, además de Héctor Guízar y Lou Lucca, campo corto y tercera base, respectivamente. Guízar tomaría el sitio que ahora ocupa Gabriel Martínez, cuya posición natural es el outfield, por lo que el puertorriqueño podría estar en el jardín izquierdo o bien en el derecho; Cornelio García o el “Bobby” Lara serían una opción para la primera base o como designados, con el fin de aprovechar su buena ofensiva.
Es importante considerar a Javier Chapa, el derecho de Nuevo Laredo está listo para regresar a la actividad y es muy posible lo haga en la serie que hoy inicia Vaqueros en el Estadio Monterrey; la presencia de este excelente lanzador vendrá a fortalecer el relevo y eso abriría más la situación para incorporar relevistas a la rotación de abridores.
Las últimas actuaciones han dejado a algunos elementos en la cuerda floja, porque la directiva no está dispuesta a aguantar más a peloteros de calidad con actuaciones muy por debajo de lo que han demostrado a lo largo de su trayectoria; actualmente si se habla de posibles refuerzos es lógico pensar que habrá quienes dejen la organización y en un análisis minucioso que cada jugador haga en lo interno podrían darse resultados interesantes.
Es difícil para “El Piri” Bellazetín voltear a la banca o al bullpen y no ver gente de confianza para ser llamada en caso de emergencia. Durante el primer juego de la serie ante Nuevo Laredo vino aquella decisión de remover a Fernando Barreras y puede haber varias razones válidas para hacerlo; una lesión, alguna ampolla, no estar de acuerdo con el receptor o sencillamente sentirse indispuesto; el problema aquí fue el ingreso de Abraham Elvira, de actuaciones irregulares y con puros bateadores derechos por enfrentar.
A la afición es difícil engañarla y varias personas manifestaron ya su descontento con las pobres actuaciones del equipo, en las que ha sido evidente la falta de profesionalismo de algunos elementos. Es importante que el pelotero, si es que tiene alguna dificultad con su cuerpo técnico o directiva, se ocupe en arreglar la situación, pero sin caer en fraudes para la afición que paga un boleto, no para ver el triunfo de su equipo, mas sí el máximo esfuerzo en el terreno de juego. Estamos en fechas en que el jugador desea una promesa de su directiva en cuanto a algún ingreso extra por llegar al play off; ojalá no sea éste el caso de Vaqueros Laguna, porque entonces sí, el esfuerzo realizado por toda una organización y sobre todo, miles de aficionados, habrá sido en vano.
Y algo que quedó en el tintero sobre el último de la serie ante Laredo; Gabriel Martínez se fue al robo de tercera en una situación que no lo ameritaba, un buen tiro de Francisco Rivera lo puso fuera de acción, pero en caso de haber llegado safe, la base intencional estaba cantada para Cornelio García y Calvin Pickering. Martínez hizo vibrar al público cuando se robó el pentágono, el de Puerto Rico es un gran chocador de bola y cuando está en los senderos se convierte en un espectáculo, aunque en ocasiones es necesario bajarle las revoluciones con que se desempeña en cada partido.
No hay duda, José Juan Bellazetín tomó una “papa caliente” y mucho deberá hacer la directiva para apoyar su labor; hoy Vaqueros Laguna está a ocho juegos de los Pericos de Puebla, el equipo al que se debe alcanzar si se quiere uno de los cuatro boletos para el play off de la Zona Norte. La calificación por la vía de los puntos se antoja un tanto complicada y como ejemplo se puede mencionar el caso de Tecolotes, hoy líder norteño, pero fuera de la postemporada si el calendario regular terminara en estos momentos.