AP
NUEVA YORK, EU.- Roger Clemens planea pitchear el viernes en la noche ante los Cardenales, nuevamente en busca del triunfo 300 de su carrera pese a una infección respiratoria que no le abandona.
"Mi día es el viernes", dijo Clemens ayer. "Sé que para entonces me voy a sentir mejor".
Al menos, eso espera. Su esposa y su hijo siguen enfermos con el mismo padecimiento, y Clemens aún tose mucho. Un intenso olor a medicamento, fuertemente mentolado, flotaba en los vestidores.
"Me siento un poco mejor", dijo. "No voy a toser encima a ustedes todo el tiempo".
Clemens se medirá con los Cardenales en el Yankee Stadium. El partido interligas marcará la primera ocasión en que San Luis y los Yanquis se enfrentan desde la Serie Mundial de 1964.
El estelar derecho trata de convertirse en el pitcher 21 en alcanzar las 300 victorias. El único otro que lo hizo jugando para los Yanquis fue Phil Niekro, que lo consiguió en el último día de la campaña 1985.
Clemens ganó el 299 el 21 de mayo en Boston. Pero después de ello perdió en casa ante los Medias Rojas y ante los Tigres en Detroit.
El sábado en el Wrigley Field, Clemens hizo solamente 84 lanzamientos antes de ser sacado del juego por el manager Joe Torre con ventaja de 1-0 en el séptimo episodio y corredores en primera y segunda, con un out.
El relevista Juan Acevedo toleró un jonrón de tres carreras a Eric Karros en su primer lanzamiento y los Cachorros ganaron 5-2.
Clemens dijo que la infección le estaba agotando y por ello no le molestó salir del juego. "Podía sentir que mi cuerpo estaba trabajando demasiado. No tenía piernas".
Acevedo, por ciento, fue dejado en libertad por los Yanquis ayer.