12 agosto 2003
Aurora, EU, (EFE).- El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, dijo que la salida de Liberia del presidente Charles Taylor ayudará a los esfuerzos por mejorar la situación de la población de ese país, que afronta una guerra civil.
"La partida de Taylor de Liberia es un importante avance hacia un mejor futuro para el pueblo liberiano", dijo Bush poco después de llegar al estado de Colorado dentro de una gira para recaudar fondos para financiar su campaña de reelección. Añadió que Estados Unidos ayudará a las fuerzas de paz y a las organizaciones humanitarias a llevar la ayuda a los que la necesitan en el país africano.
Al respecto, el secretario de Estado, Colin Powell, aseguró que el comandante de las fuerzas estadounidenses fondeadas frente a las costas de Liberia irá en las próximas horas a ese país para ver cómo EU puede ayudar a abrir un puerto que mantienen en su poder los rebeldes de modo que pueda llegar la ayuda humanitaria por él.
Bush habló con los periodistas en Aurora después de que el Pentágono anunciara en Washington que las fuerzas militares de Estados Unidos se han apostado "frente a la costa" de Liberia tal como lo ordenó Bush hace más de dos semanas, y que se mantendrán en ese zona porque las órdenes no han cambiado.
"El presidente Bush ordenó el 25 de julio que las fuerzas navales y militares de Estados Unidos se aproximaran y se apostaran frente a la costa de Liberia", dijo un portavoz del Pentágono.
Desde Monrovia (capital de Liberia), unas dos horas después que el presidente Taylor abandonara el gobierno de Liberia, pudo verse la silueta de tres buques de guerra estadounidenses en el horizonte. El portavoz dijo que hasta el momento el Pentágono no ha recibido del presidente otra orden sobre la misión en el área.
El grupode fuerzas armadas lo componen la nave "Iwo Jima" con el escuadrón 6 de asalto anfibio y los muelles flotantes de transporte "Nashville" y de desembarco "Carter Hall". La dotación de esta fuerza naval y de asalto anfibio suma unos 2.500 marineros y 1.500 infantes de Marina.
La semana pasada el Pentágono dispuso el emplazamiento en Monrovia de una docena de infantes de Marina, asignados a la protección de la embajada estadounidense en esta capital y el enlace con la fuerza multinacional del Africa occidental llegada a ese país para poner alto a la guerra entre facciones.
Taylor condicionó su renuncia a la presidencia a que Estados Unidos emplazara una fuerza de mantenimiento de la paz, pero el gobierno de Bush se ha mostrado renuente a involucrar sus tropas en el conflicto en el Africa occidental.