SAN SALVADOR (AP).- Un grupo de enmascarados ocuparon el miércoles la catedral capitalina en medio de una jornada de protestas de organizaciones sociales y médicos del Seguro Social contra la privatización de ese sector.
La policía cercó el templo, ubicado en el centro de la capital salvadoreña, tras la toma por parte de al menos unos 20 desconocidos.
José Hernández, colaborador de la catedral, dijo a la AP que los sujetos ingresaron enmascarados a la iglesia y exigieron a un grupo de feligreses abandonar el edificio.
"No se sabe si estaban armados, andaban con mochilas", dijo Hernández desde un edificio contiguo a la catedral. "Las autoridades están dialogando con ellos para que salgan", agregó en entrevista telefónica.
Los sujetos extendieron pancartas con frases de rechazo a la privatización del Seguro Social y ocupaban los altavoces para lanzar consignas contra el gobierno.
Desde septiembre pasado los médicos se mantienen en huelga no solo como protesta contra la privatización, sino también para exigir su reinstalación y el pago de salarios retrasados.
Los enmascarados afirmaron que sólo negociarán su salida con la mediación de la Procuradora para la Defensa de los Derechos Humanos, Beatrice de Carrillo y el obispo auxiliar de San Salvador, monseñor Gregorio Rosa Chávez.
La toma de la catedral es la primera que ocurre desde la firma de los acuerdos de paz en 1992 entre el gobierno y la ex guerrilla salvadoreña. Durante el conflicto armado de 12 años fue ocupada constantemente.
El incidente ocurre en medio de una jornada de protestas de varias organizaciones sociales contra las negociaciones de un tratado de libre comercio entre Estados Unidos y Centroamérica, que inician este miércoles en Washington.
Grupos de manifestantes obstaculizaron por varias horas algunas de las principales carreteras del país, dijo a la AP Margarita Posada, dirigente de la denominada Alianza Ciudadana contra la Privatización.
"Esto (del comercio con Estados Unidos) lo que va a traer es más desempleo, más pobreza y más exclusión social", expresó Posada desde las afueras de la ciudad de San Miguel, al este del país.
"Esta es una resistencia prolongada del pueblo, estamos en una franca lucha", agregó.
La policía informó que durante las concentraciones no se registraron incidentes.