El telón de fondo de las próximas elecciones -el Pemexgate, con su megamulta de mil millones, y Amigos de Fox, aún impunes y envueltos en tinieblas- es bastante sórdido y poco confiable. Qué bueno que ajustició el IFE al PRI por los 500 millones del sindicato petrolero para Labastida, aunque todavía falta hacer lo mismo con los 600 millones del sindicato ferrocarrilero para Zedillo. Pero qué mal que “no haya tenido tiempo” para encuerar al PAN y a los Amigos.
Y en medio de la jauría que son PAN, PRI, PRD, plus los chiquitos, se ve y se oye a gente desesperada que quiere un hueso, pero muy poca que proyecte convincentemente una voluntad de hacer algo por el país. La incipiente democracia no logra erradicar viejos vicios. Los partidos resquebrajados por dentro están enseñando lo peor de la vieja política mexicana, el voraz fantasma de la rebatinga.
Por otra parte, los partidos han vuelto a la falsedad de las encuestas en TV y se han alejado del pueblo, de los votantes reales. Ninguno puede estar seguro de los resultados. Ojalá tengamos el contrapeso de un Congreso plural.
P1.- Los mercadotécnicos panistas aseguran en pantalla su triunfo (virtual en todos sentidos), pero en bambalinas tiemblan y se curan en salud. Dicen que si pierden el seis de julio es por culpa de Vicente y de Marta y se separan de la pareja presidencial que por cierto sigue metiendo patas: En reciente programa de TV Azteca, Marta explicó que su marido utiliza dos horas para trotar en Los Pinos por prescripción médica, otras dos para comer verduritas, una hora para atender asuntos de familia y del rancho, y como sólo trabaja de nueve a cinco, pues resulta que sólo dedica tres horas diarias para atender asuntos nacionales. Por eso estamos como estamos, comenta mi amigo Oikos. Sin embargo hoy Marta-Eva es la única de todo el inútil amasijo gubernamental, que dio un campanazo valiente, inteligente y útil. Le quitará votos al PRD pues dejó de ser una mocha mosquita muerta para ser una mujer responsable y preocupada por la salud pública y la libertad sexual de los mexicanos, al recomendar el indispensable uso del condón. Le valieron los curas. Bravo, señora presidenta.
Tienen razón los panistas en su temor de las elecciones, pero que no sólo le echen la culpa a Fox quien de hecho fue “candidato externo”. En su descargo, esta opinión: Lo que tiene de panista lo llevó a autoboicotearse, empezando por la selección de miembros del gabinete para pagar al partido que lo llevó al poder. No fueron todos, ni muchos, pero sí sus peores colaboradores los de la cuota del PAN. Excelente ejemplo, el hoy futuro legislador Pancho Barrio que obviamente no hizo nada como Zar Anticorrupción por estar metido en ella hasta las manitas. Y resulta que su partido lo pondrá de “Jefe Cameral” para protegerlo, entre muchos graves reproches, contra una demanda de robo de tierras en Chihuahua cuando fue gobernador.
A Fox le importa que el PAN gane las elecciones, pero un Congreso blanquiazul le haría variar su nacionalista y aplaudida postura actual respecto a Pemex. Tendría que regalar el petróleo a los gringos como quería, pero ya no quiere, aunque en estos años nos enquistó en Pemex contratos sospechosísimos que el nuevo Congreso debería revisar. Fox empezó hasta de precandidato prometiendo vender la paraestatal. Hoy dice que “Pemex nunca ha estado ni estará a la venta”. Con una mayoría panista-entreguista se vería obligado a vender, señor Presidente. Hace mucho se murió Conchello, el único (o casi) panista con ideas patrióticas.
P2.- El priismo hoy sigue tan cínico como Bush, sólo que no está en la Casa Blanca. Y tiene razón la gente que teme su regreso al poder por lo mal que han gobernado los panistas. Asaltado y avasallado por los sinvergüenzas Madrazo y “La Maistra”, acólitos de Salinas y de nuevo bajo su batuta, el PRI ha dejado fuera a más de la mitad de sus huestes entre las que se encuentran los únicos priistas rescatables. El PRI actual lejos de regenerarse es una camarilla aterradora de explotadores aliados además al panismo, como recordamos, espero, los mexicanos. Ilustran perfectamente la propaganda del PRD: “PAN Y PRI”... son lo mismo cuando se trata de fregar al país. Remember el megafraude del Robaproa. Y prueba de que sigue el PRIAN es la propia Gordillo y su exoneración.
¿Cómo querían los desesperados profesores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, que se mueren de hambre y de rabia contra esta encarnación del citado cinismo priista, que el buenazo del general Macedo de la Concha declarara a Elba Ester culpable cómplice en los asesinatos de maestros con su ex novio Jongitud Barrios? Es cuatísima de Fox, de Castañeda, de Aguilar Zínzer -el de la hemorragia de la nariz en el Consejo de Seguridad (como dice Hernández Haddad, la única sangre que corrió en la ONU por lo de Iraq). Es amiga de muchos periodistas. Por ahí tengo el testimonio de empleados de “La Maistra” despedidos porque no le hicieron bien el moño a un auto Mercedes Benz que le enviaba a un periodista al que cortejaba. Bueno y también es amiga de Marta Sahagún que públicamente le declaró su amistad. A Madrazo, acusado de ladrón en Tabasco, seguro lo exoneran también.
P3.- Al PRD en lo personal le estoy muy agradecida. La incuria y resistencia de sus tres gobiernos en el DF para arreglar una importante avenida del pavoroso Polanco en donde vivía, me obligó felizmente a mudarme de mi ciudad natal a mi puerto casi natal, en el que por cierto también gobierna el Sol. Aunque le sobran manzanas podridas a ese partido, tipo madame Padierna, tan cercana a AMLO, las ideas perredistas siguen siendo para mí las más aceptables. Ojalá algún día las apliquen a fondo y para beneficio de todos, no nada más de los pobres o de los muy ricos. Mi voto de julio por lo pronto irá a un partido chiquito que parece de buena fe, a diferencia de los grandes PPP. www.manu-dornbierer.com.mx