PARIS, (Reuters).- El tenista español Juan Carlos Ferrero y el holandés Martin Verkerk disputarán el domingo la final del Abierto de Francia tras vencer el viernes al campeón Albert Costa, de España, y a Guillermo Coria, de Argentina, respectivamente.
En la primera semifinal del día, Verkerk superó a Coria por 7-6 (7-4), 6-4 y 7-6 (7-0) y, a continuación, Ferrero, tercer preclasificado, ganó a su compatriota por 6-3, 7-6 (7-5) y 6-4.
La revelación del Abierto de Francia, Verkerk, se convirtió el viernes en el tercer holandés que llega a una final de Grand Slam al derrotar en tres sets al argentino Coria en semifinales del Abierto de Francia.
Verkerk, clasificado en el puesto 46 del ranking mundial, superó al séptimo preclasificado del torneo Coria, que había sido el verdugo de Andre Agassi en el torneo.
Desde que Richard Krajicek ganase Wimbledon en 1996 y fuera finalista Tom Okker del Abierto de Estados Unidos en 1968 no había llegado un compatriota suyo a una final de un torneo máximo.
El último jugador no preclasificado en llegar a la final de Roland Garros, como es el caso de Verkerk, fue el ruso Andrei Medvedev en 1999.
Verkerk venció a Coria en dos horas y 40 minutos pero podría haber sido incluso antes de haber sido descalificado el argentino cuando soltó su raqueta al final del primer set y fue a parar donde estaba una recogepelotas que fue golpeada en la cabeza, incidente por el que pudo haber sido expulsado, aunque recibió una advertencia.
"Arrojé mi raqueta para tocar la pelota como siempre hago pero salió disparada de mis manos. Me sentíí mal durante los siguientes puntos y quizás es por lo que perdí el segundo set. Fue una verdadera mala suerte. Me excusé tres o cuatro veces. Me sentí muy mal. No quise hacer daño cuando la arrojé", siguió diciendo Coria tras el encuentro.
Mientras todo eso estaba pasando, Verkerk estaba tranquilamente sentado, esperando la reanudación del encuentro.
Tras haber ganado el set inicial en el tiebreak con grandes pegadas y poderosos saques, se aseguró el segundo set por 6-4 de forma similar.
Coria reacción en el tercer set con buen juego de fondo, pero el holandés siguió impactando con sus fuertes saques y su poderoso golpeo de la pelota.
Pero, al llegar al tiebreak, el poderoso servicio del holandés, con su ace número 19 en el partido, y sus firmes devoluciones le dieron la victoria por 7-0 y las clásicas escenas de alegría del ganador.