19 septiembre 2003
Bagdad, (EFE).- El ex ministro de Defensa del Gobierno de Saddam Hussein, general Sultán Hashim Ahmad, se entregó hoy a las tropas estadounidenses en Mosul, norte de Iraq, tras negociar su rendición, anunció la Liga iraquí de Derechos Humanos.
Según el portavoz de la organización humanitaria, el kurdo Daoud Baghestani, la entrega se produjo con la condición de que el nombre de Sultán Hashim Ahmad se suprima de la lista de los 55 dignatarios del antiguo régimen más buscados por la coalición.
Baghestani precisó en rueda de prensa que el ex ministro iraquí de Defensa goza de buena salud, que las fuerzas estadounidenses "le tratan con respeto" y que en la rendición medió el líder del Partido Democrático del Kurdistán (PDK), Masud Barzani.
Sultán Hashim Ahmad permanecía en paradero desconocido desde la caída del régimen de Sadam Husein el 9 de abril, aunque en las últimas semanas habían surgido rumores de que negociaba su entrega.
Ex jefe del Estado Mayor iraquí, Sultán Hashim Ahmad fue el encargado de fijar con el general norteamericano Norman Schwarzkopf las condiciones del alto el fuego tras la expulsión de las tropas iraquíes de Kuwait en la Guerra del Golfo de 1991.
Militar de carrera y de físico corpulento, el ex responsable de Defensa está considerado un profesional de las Fuerzas Armadas que no participó en los crímenes políticos y las campañas de represión del antiguo régimen iraquí.
Poco antes de la guerra para derrocar a Sadam Husein, en Bagdad se propagaron insistentes versiones de que Sultán Hashim Ahmad había intentado desertar y que permanecía fuertemente custodiado.
Ya iniciado el conflicto armado, compareció al menos dos veces ante la prensa en la capital iraquí, en la primera de ellas para, entre otras cosas, afirmar que "si fuera por nosotros, pararíamos ahora mismo la guerra".
En aquella ocasión también se mostró dispuesto a aceptar "cualquier tipo de mediación de una tercera parte" para detener las operaciones armadas contra su país.
Una vez concluida la conflagración, en algunos medios se consideró la posibilidad de que Sultán Hashim Ahmad u oficiales bajo su mando, hubieran traicionado al ex presidente iraquí, lo que explicaría la rápida caída de Bagdad prácticamente sin resistencia.
Con la entrega del ex ministro de Defensa de Sadam se estrecha aún más el cerco sobre el antiguo líder de Bagdad, tras la detención del vicepresidente de su gobierno, Taha Yasín Ramadán, y la muerte de sus dos hijos, Uday y Qusay, en un enfrentamiento con las tropas de EU, en sucesos que asimismo tuvieron Mosul como escenario.
Observadores locales consideran no obstante que la rendición de Sultan Hachem no debilitará a la resistencia surgida tras la ocupación, que ayer prosiguió sus operaciones con un nuevo ataque en Tikrit que costó la vida a tres soldados estadounidenses, informaron hoy fuentes militares de EU.
Cuna de Sadam Husein y en una zona que podría servirle ahora de escondite, esa ciudad está situada en el extremo septentrional del conocido como triángulo suní, al norte de esta capital, donde el ex líder iraquí cuenta todavía con amplia simpatía entre la población y área en la que se han registrado la mayor parte de las acciones armadas de los partidarios del antiguo régimen de Bagdad.