PACHUCA, HGO.- La ventaja 3-1 sobre Tigres no es definitiva y en Pachuca hay conciencia de que el partido de vuelta de la final será mucho más complicado que cualquier otro de la liguilla, juzgó el defensa central de Tuzos, Francisco Gabriel de Anda. "Nos espera un encuentro muy difícil contra un adversario que no está muerto y se va a jugar la vida contra nosotros", advirtió el autor del tercer tanto hidalguense.
El grupo está marcado por lo sucedido en el choque de vuelta de cuartos de final contra Necaxa, donde luego de vencerlos por 3 a 1 en la ida en el Estadio Victoria, el grupo se relajó y estuvo cerca de ser eliminado por Hidrorrayos.
Los pupilos de Raúl Arias empataron el global a tres en el primer tiempo, además que perdieron la oportunidad de darle la vuelta con una pena máxima fallada por Carlos González en el lapso inicial.
Llamó el zaguero a sus compañeros a mantener la concentración los 90 minutos que restan de la final en el Estadio Universitario y que deben jugar mejor que en la ida, "con la misma disposición y la misma actitud que tuvo el grupo en nuestro primer partido".
El equipo descansó por la mañana por decisión del cuerpo técnico y la práctica se efectuó hasta la tarde.