Nueva York, EU (Notimex).- Dos jovenes mexicanas, separadas por azares del destino hace 20 años durante sus respectivos procesos de adopción, se reencontraron en Nueva York, también por casualidad, sin saber una de la existencia de la otra.
Las gemelas fueron adpotadas de manera individual por dos familias estadounidenses, en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, poco después de su nacimiento, pero complicaciones burocráticas parecen haber evitado el intercambio de datos entre unos y otros.
Dos décadas después, a miles de kilómetros de distancia, en Nueva York, un joven que conocía a una de ellas, fue invitado a la fiesta de cumpleaños de la otra, sin saber que eran gemelas separadas al nacer.
Al ver que la festejada se parecía demasiado a una amiga, le insistió en que tenía que conocerla y tras establecer el vínculo, las dos chicas, Tamara y Adriana, intercambiaron mensajes electrónicos y una fotografía digital, y decidieron reunirse.
Antes de ello, ambas comentaron el incidente con sus respectivas familias. Una de ellas, la madre de Adriana Scott, sabía que su hija tenía una hermana gemela pero nunca supo cómo o dónde buscarla pues no tenían datos de los padres adoptivos.
La otra familia, la de Tamara Rabi, nunca supo que su hija tenía una hermana gemela y para su madre la sorpresa fue tan grande como para su hija, de acuerdo con el diario The New York Times, que dio a conocer la historia esta semana.
Las jóvenes acordaron reunirse en diciembre pasado, en el estacionamiento de un restaurante McDonald?s en Long Island, Nueva York, cerca de la Universidad de Hofstra, donde estudia Tamara, quien fue criada por una familia judía.
Ambas fueron con amigos a la reunión y ambas intentaron, según el reporte, arrepentirse del encuentro momentos antes de que tuvo lugar.
Adriana, que fue criada bajo la fe católica y que reside en Long Island con su familia, señaló que encontrar a una hermana gemela idéntica "fue un sueño hecho realidad" y que la coincidencia de hallarse no deja de asombrarle.