La determinación del Consejo de Posgrado de la Facultad de Derecho de rechazar a cinco aspirantes que no reunían los requisitos para ingresar como estudiantes, principalmente porque no acreditaron un promedio general de la licenciatura de 8.0, será respetada, afirmó ayer el rector de la UJED, José Ramón Hernández Meraz.
Después de una reunión que duró aproximadamente una hora y media, en la que estuvieron el director de la Facultad de Derecho, Roberto Aguirre Návar; el director de la División de Estudios de Posgrado de la propia institución, Jesús Quiñones Ruiz; el secretario general de la UJED, Carlos Silerio Medina, y el abogado general, Roberto Martínez Tejada, el Rector sostuvo una rueda de prensa con los reporteros que esperaban los resultados de la junta.
“Se respeta la decisión del Consejo de Posgrado de la Fader”, dijo Hernández Meraz al reiterar que los requisitos establecidos no se pueden modificar, al reconocer que no podía desautorizar el acuerdo que había tomado la instancia universitaria que sesionó el pasado 14 de febrero, aceptando a 17 aspirantes a ingresar a los estudios de doctorado y rechazando a 6 porque no reunieron los requisitos.
El pasado miércoles el director de la DEP de la Fader, Jesús Quiñones Ruiz, afirmó que había una clara intención de violar la normatividad de esta institución educativa, porque funcionarios de la administración central de la UJED estaban presionando para que se admitiera a cinco aspirantes que no había reunido los requisitos, y de manera concreta señaló al secretario general, Carlos Silerio Medina, de tratar de violentar la legislación universitaria en sus aspiraciones por ser rector.
A raíz de estas declaraciones, Hernández Meraz determinó suspender no la sesión formal, sino la reunión a la que estaba convocando para ayer en la tarde a los integrantes del Consejo de Posgrado, solamente para “platicar”.
Después de la reunión con los directivos de Fader, el Rector aclaró que el acuerdo quedaba firme tal como lo había decidido el Consejo de Posgrado. “Los requisitos no se pueden modificar; si hemos estado en contra de los posgrados patito, tenemos que ser serios y fundamentalmente en Derecho”, afirmó.
Después de la reunión, se trató de entrevistar al Secretario General sobre los señalamientos directos que había hecho Quiñones Ruiz, pero a través de María Eugenia Pérez, su auxiliar, mandó decir que la versión la daría el Rector.
En sus declaraciones, Hernández Meraz reiteró que no se podía echar abajo una decisión del Consejo de Posgrado, ni que hubo ese intento ni estuvo metido de mala fe el Secretario General de la Universidad. Recordó que el pasado lunes 17 recibió a un grupo de posgrado que le hizo planteamientos de algunos requisitos para seguir en el mismo posgrado. “Los atendí, y estaban presentes el Secretario General y el Abogado General”.
El Rector reconoce que les dijo a los estudiantes que iba a hablar con las personas que integran el Consejo de Posgrado de la Facultad de Derecho, “y ayer, por los medios de comunicación, fui enterado que se le había dado una versión diferente a esto”.
Comentó que: “El Jefe de la División de Estudios de Posgrado se sintió agredido y externó algunos puntos de vista en contra de nuestro Secretario General y el Abogado General”.
En la plática de ayer dijo que estuvieron el Director de la Fader y el de la DEP, y no había ningún problema. “No lo hay en cuanto a que no se puede despersonalizar a ningún cuerpo colegiado de la Universidad. Porque no tendría ningún sentido; primero los autorizamos a tomar decisiones y después los desautorizamos con mis actitudes”.
Con base en lo anterior, se determinó suspender la reunión de ayer en la tarde, pero aclaró que no era una convocatoria para celebrar una sesión formal sino “para platicar”. Pero reconoció que hubo una distorsión de la información, que dañó las relaciones de carácter interno.
“Estoy haciendo votos para que mis compañeros, pronto, se afinen en esta situación. No sé de dónde vino la mala fe, no fue de la Rectoría, del Secretario General o del Abogado General”, afirmó.