05 de diciembre de 2003
MEXICO, D.F., (SUN-AEE).- Será en las próximas horas cuando los 12 gobernadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) sostengan una reunión con la aún coordinadora de los diputados priístas, Elba Esther Gordillo, para definir la posición de los mandatarios en la reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), a realizarse el próximo 8 de diciembre en Puebla.
Y aunque el gobernador de Sinaloa, Juan S. Millán, dijo no estar invitado, señaló que sin defender a la maestra Gordillo, se está convocando a los diputados a hacer una reflexión sobre lo que significa en este momento la escisión y la confrontación que se está dando al interior del grupo parlamentario del PRI.
"Ella (Gordillo) va a estar presente pasado mañana en una cena en Puebla que es la reunión de la Conago y seguramente vamos a platicar con ella, si es hoy o mañana no estoy incluido en el grupo", aclaró.
Destacó, no obstante, que al interior del PRI y entre diputados y gobernadores nunca ha habido una confrontación ni descalificaciones.
"No hay tal ruptura; no he escuchado una sola voz como gobernador descalificando a los diputados federales, creo que todos al menos con los que he platicado, casi todos los días, estamos por una recomposición y la unidad un restablecimiento", dijo.
En ese sentido lanzó un llamado a los legisladores del PRI para que funcione como un bloque parlamentario, que se pongan de acuerdo con quien se encuentre la convergencia y planteamientos, así como con diputados de otras fracciones parlamentarias y lograr el número de diputados que permitan las reformas, principalmente la fiscal.
Al hablar sobre la reforma fiscal, reconoció que podría alargarse la discusión hasta un periodo extraordinario, que pondrá en muy serios problemas al país, si no sale adelante.
"Visualizamos falta de recursos económicos, tenemos fuertes presiones en todo el país en cada uno de los estados, municipios, los sectores productivos requieren de la claridad de presupuestos para poder operar la inversión", dijo.
Añadió que en la actualidad el Presupuesto no alcanza para mantener un estado de por sí, con rezagos sociales, con una pobreza que cada día provoca más problemas.
"Creo que en este momento la adjudicación de culpas pasa a un segundo o tercer plano, lo que debe estar en primer plano es la preocupación de todos los mexicanos para que se ponga en uso la inteligencia, nuestra capacidad, nuestra voluntad para lograr los acuerdos", reconoció.
Acotó que quienes estén pensando que la aprobación o no de la reforma fiscal traerá dividendos electorales "se van a llevar un resultado inesperado".