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Ser Humano / ¡No por favor!

Psicólogo Ricardo Mercado Dávila

Reyes, Flores, Landeros y Cía.

¡Ya no ensucien mi ciudad!

Les digo que había jurado que no escribiría más acerca de las pasadas elecciones, pues para mí eran caso cerrado, y aún leyendo que se habían anulado las del sexto distrito, me mantuve firme en mi decisión de no abrir mi bocota.

Aaah… pero tenía que llegar el Sr. José Luis Flores Méndez, a la sazón presidente del Comité Directivo Estatal del PRI a picarme la cresta y a forzarme a responder a sus palabras cuando el pasado lunes dijo textualmente: “No es una nueva versión de un proceso, sino otra vez a empezar, así pues, ¡Se pintarán bardas, mantas y se llenarán de pendones el área del sexto distrito!’’.

Y fue eso lo que hizo que rompiera mi promesa para decirle públicamente: ¡No, por favor! No, señor Flores Méndez... ¡Ya no ensucie mi ciudad!... ¿Acaso cree usted que los torreonenses somos entupidos? ¿Acaso cree usted que los habitantes del sexto distrito somos retrasados mentales como para que el PRI considere que ya “nos olvidamos” de los nombres de los contendientes? ¿Acaso cree usted que no sabemos quién es Laura Reyes Retana (PRI)? ¿Quién es Jesús Flores Morfin (PAN)? ¿Quién es Manuel Landeros (PRD)? ¿Quién es Marina de Llano (PT)? ¿Quién es Ana María Siller (PVEM)? ¿Quién es Héctor Astorga (Convergencia)?

Por favor... créamelo... ¡No somos tontos!... no ofenda nuestra inteligencia… no se nos han olvidado los candidatos. ¿Y cómo hacerlo?, si embadurnaron con su publicidad nuestra bella ciudad. Si saturaron nuestras calles y mentes con sus imágenes. Si taparon nuestras alcantarillas con tanta basura publicitaria. Si se cubrieron nuestras tierras laguneras con miles de kilos de plásticos propagandísticos “no degradables”. ¿Cree usted que vamos a olvidar eso?... ¡Jamás!... y le juro por la memoria de mi padre que si vuelvo a ver mi ciudad hecha un asco por la publicidad de unas nuevas elecciones... ¡No voto!... y me uno al grupo de apáticos que se quedan en sus casas, protestando “frente a una cheve”.

Cuando sales de Torreón y conoces otras ciudades de nuestro estado o de estados vecinos, es cuando te das cuenta de la bella ciudad que tenemos, de sus enormes calles, de sus planeados bulevares, de sus hermosas colonias, de su funcional periférico que hace que los viajeros crucen rápidamente nuestra ciudad sin molestia alguna, y no como el periférico de la ciudad de Chihuahua que es una vergüenza para una ciudad con tan bello “corrido” y donde para cruzarla debes de reservarte “una hora de pérdida de tiempo”, atravesando colonias populares, calles estrechas y tendajos de mala muerte.

Y es al ver esto, cuando te entra lo patriota y elevas tu voz -o tomas la pluma- para decir… ¡No más!... Aquí no mandan los partidos políticos y sus arbitrariedades, aquí mandamos los torreonenses, y si ha de haber nuevas elecciones, éstas deberán caracterizarse por ser “limpias”, y al decir limpias no me refiero a que no haya tranzas, pues quiero pensar que ya hemos madurado, y que aquellos robos de urnas y urnas rellenadas -de votos- aún antes de la llegada del primer votante (ya hasta olvidé ¿que partido lo hacía?)… ya han desaparecido.

Quiero pensar que ahora los ciudadanos somos más honestos, pues nuestros hijos crecen y se casan, y ahora habemos en las mismas familias honestas, tanto militantes del PAN como militantes del PRI -y uno que otro “izquierdozo” del PRD-, así que ahora en las comidas ya no podemos hablar de ladrones, ni de tranzas, pues si escupimos al cielo, a lo mejor y le cae a un hijo, a un yerno o a un amigo.

Si como digo, hemos llegado a un grado determinado de madurez y de civilización, yo me pregunto: ¿Por qué no usar los recursos que el gobierno otorga a cada partido para embellecer más nuestra ciudad? ¿Por qué el PAN no usa los recursos que le darán para la nueva votación del sexto distrito, para poner una estatua de bronce en algún crucero, y que sea ésta un monumento a la democracia y a la urbanidad?

¿Por qué el PRI no se abstiene de embadurnar calles y paredes y mejor usa ese dinero para embellecer al sexto distrito con camellones de flores, o foquitos navideños para las próximas fiestas decembrinas. Y así sucesivamente los diferentes partidos que contienden, y estoy seguro de que si el PRI usara sus recursos en embellecer -por ejemplo- la colonia Los Ángeles -que por tradición ha sido siempre panista-, por mi madre que más de dos se cambiarían de partido... nomás por el detallazo.

Respecto al hecho de que hayan nulificado los pasados comicios, tengo mi opinión muy personal:

1.- Como principio, me sorprendió gratamente que por fin el Tribunal Electoral de la Federación se atrevió a nulificar unos comicios, cuando todos creíamos que esa maquinaria ya estaba tan oxidada por 60 años de estar parada, que ni matándoles al candidato se atreverían a nulificarlas.

Sin embargo, y como siempre sucede, me llama la atención que no midieran “con la misma vara” el fraude hecho en Saltillo y que lo probaban aquellos videos que publicó Televisa y en red nacional. Bueno Fer… no le pidas peras al olmo y date de santos que por fin la maquinaria se desatascó, luego de años y años de servir a un sólo dueño.

2.- Por otro lado, no me parecieron congruentes los argumentos que esgrimió el PRI como “razones de peso” para nulificar unas elecciones (“osease” que nuestros votos y nuestro tiempo se los pasaron de un plumazo por el arco del triunfo -de París-), y me llenó de indignación el hecho de que entre los argumentos mencionaran la cancelación de votos hormiga… dando como un hecho que los diferentes jefes de casilla -y sus ayudantes- poco a poquito fueron quitándole votos a la Sra. Laura Reyes Retana.

Con esto pusieron en tela de juicio la honorabilidad de los jefes de casilla, quienes en una forma honesta y desinteresada se prestaron a ayudar en los pasados comicios, y eso que se supone que aquellos que fueron elegidos, eran personas “honestas”, por lo cual, al hablar de cancelación de votos hormiga, todo sonó a que los jefes de casilla no eran… lo honesto que se pensaba.

3.- Como último punto, no me preocupa para nada el que se repitan las elecciones, pues estoy bien seguro de quién va a ganar… ¿Quién?... ¡Quien queramos nosotros… los del sexto distrito!, ya que si sale Flores, Reyes o Landeros, ello será signo inequívoco de que “eso queríamos todos” - y espero que ahora si lo respeten-, y a nadie deberá molestar el resultado que se dé, partiendo del principio de que la palabra democracia -del griego- significa nada más y nada menos que aquí en Torreón… ¡El pueblo y sólo el pueblo… somos la autoridad!

COROLARIO:

Cómo extraño a don Waghi Saade y a aquel grupo de viejos honestos que formaron aquel “Consejo Ciudadano” que representaban el sentir de La Laguna. Grupo entrañable que llegó a tener mucho peso específico en la toma de decisiones para el beneficio de nuestra ciudad.

Para estas próximas elecciones, yo lo invito a que si ve que el PRI ensucia con propaganda nuestro sexto distrito… ¡Vote por el PAN!... y si ve que es el PAN quien lo ensucia…¡Vote por el PRI!... a ver si así entienden los partidos de una vez por todas quién es el que manda aquí.

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