SUN-AEE
SANTO DOMINGO, REP. DOMINICANA.- Mito y tabú, palabras que envuelven la práctica sexual de los deportistas durante una competencia de alto rendimiento.
Hacerlo o no depende de un aspecto cultural, de información.
Mientras ciertos atletas, como los boxeadores, se mantienen célibes durante tres meses, otros "lo hacen", inclusive un día antes de competir.
Mito y sexo. Sexo y mito. Tabú.
No se ha divulgado a ciencia cierta la cantidad de energía que representa una práctica sexual. Hay quienes afirman que es el equivalente a subir tres pisos de un edificio. Todo estriba en no caer en el exceso, para evitar una baja considerable en el rendimiento deportivo.
Por ejemplo, aquí, en el marco de los Juegos Panamericanos, entre los 5 mil 500 atletas que se encuentran en la Villa Panamericana, un total de 200 mil condones están a su disposición. Son un promedio de 40 preservativos por deportista, durante los 17 días de competencias. De los 42 países participantes sólo Canadá y Estados Unidos son los únicos no latinos.
"Son los caribeños los que más los han demandado", dijo sonriente el jefe de prensa de la Villa, Manuel Vólquez. Y, según la prensa australiana, durante los Juegos Olímpicos de Sidney fueron los cubanos los campeones en su uso.
"Está demostrado que somos animales pensantes de costumbres, y que cuando esas costumbres se rompen puede ser algo riesgoso", dijo Carlos Mercenario, medalla de plata de marcha en Barcelona 1992. Y mencionó que puede haber mayor tensión emocional, estrés y desconcentración.
Con 20 años como atleta de alto rendimiento, reconoció que el tema del sexo y el deporte "es un tabú, por lo general, por ignorancia". Ejemplificó que si estás acostumbrado a comer algo ligero antes de cada competencia y no te duele el estómago durante la justa puedes seguir haciéndolo. O como aquel que no ingiere nada, ni agua. "Es cuestión de hábitos, costumbres", insistió.
Pero si alguien puede tener problemas para manejar la sexualidad de un grupo de deportistas es el doctor del Tri, Raimundo Uribe. Curiosamente, nunca menciona la palabra sexo durante la entrevista. Se refiere a él como "esa circunstancia".
Tiene casi dos décadas en el futbol profesional, la mayoría con Atlante. Son 18 los futbolistas mexicanos, menores de 23 años, que se encuentran en esta ciudad.
"No hay problema porque los muchachos están concentrados en la competencia y no tienen, llamémosle, necesidad de circunstancias ‘de esto’..." En plena competencia se ha discutido mucho y se sabe que no representa ningún riesgo para la salud tener sexo y que muchos de ellos, siendo casados, se concentran un día antes del partido y con eso es suficiente.
Según él, de acuerdo con algunos estudios técnicos, la práctica sexual suele utilizarse como método de relajación. "Es muy útil", reconoció, "sobre todo cuando existe mucha presión en torno a una competencia. Llega a resultar benéfico, siempre y cuando no haya exceso".
Dos de los jugadores del Tri con mayor experiencia, Aarón Galindo y Juan Carlos Cacho, coincidieron en opinar que tienen prohibido sostener sexo "por el rendimiento del jugador que baja notablemente, horas antes de algún encuentro".
La principal limitante es que están en el hotel, concentrados, y no se permiten -en teoría- mujeres en las habitaciones.
Alejandro Hernández, tenista profesional, aceptó que hay un mito "tan malo" en torno a ese tema que no se sabe si es bueno o malo. En lo personal aseguró que no le afecta. Y que todo va en función de los resultados deportivos. Si lo haces y ganas, bueno. Y si no lo haces y pierdes, malo. Todo depende del hábito de cada quien.
En el caso de Santo Domingo, matizó que también influye el clima. "Porque con el calor uno viene bajo de energía, con o sin relaciones sexuales".
Porque, subrayó, hay que estar conscientes que puede necesitar cada gota de energía que tenga en el cuerpo en el momento decisivo de una competencia. Por eso urgió a los médicos especialistas del Comité Olímpico Internacional (COI) a "emplearse más a fondo y hacer una investigación seria" sobre el tema.
Sexo es igual a mito. Tabú al inicio del Siglo 21.