POR CECILIA AGUILAR ACUÑA
MARÍA ELENA HOLGUÍN
EL SIGLO DE TORREÓN
COMARCA LAGUNERA.- Las salas de consulta externa del Instituto Mexicano del Seguro Social de Gómez Palacio, ayer estaban atiborradas de derechohabientes luego de que fuera anunciado el desistimiento a huelga. Los trabajadores mostraban una cara de satisfacción y dentro de la agitación rutinaria, se respiraba un ambiente de tranquilidad.
El director de la Unidad de Medicina Familiar número diez, Paulino G. González Peña, con una sonrisa a flor de piel anunció su regocijo porque la huelga al final no se presentó, “esta semana en realidad fue de tensión para todos nosotros, porque de haberse dado, este problema seguramente habría trastocado la tranquilidad de la vida nacional; pero estamos contentos por los términos en que acabaron las negociaciones”.
En la sala, los derechohabientes esperaban su cita. Ahí como siempre estaban las señoras con la típica bolsa de plástico donde colocan su tejido o su servilleta para bordarla y matar el tiempo mientras las llaman a consulta. También los señores, en su mayoría ancianos, quienes taciturnos aguardaban su turno.
Efrén Peña y Yolanda Orozco de Peña con sus tres niños, esperaban entrar a consulta, pues en días pasados ella había tenido una caída y su pie estaba amoratado. Ellos se sorprendieron cuando se les cuestionó si estaban contentos con que la huelga se había cancelado, “no sabíamos nada”, dijeron mientras intercambiaban miradas de asombro.
Entre el ir y venir de gente, caminaban Isidro Tarango y Socorro de Tarango, quienes informaron que apenas se habían enterado del conflicto del IMSS, “con razón escuchamos a unas señoras comentar algo sobre eso, pero apenas supimos... pero ¡ay, qué bueno que no se dio!, si no qué haríamos sin nuestras medicinas...”.
A la salida de esta clínica, estaba Griselda Pérez, quien se gana la vida vendiendo churros. A ella la noticia de la huelga le llegó por una de sus clientas, “luego escuché algo por televisión, pero qué bueno que el problema no pasó a mayores, pues si no, imagínese, quién iba a comprar mi vendimia”.
Dos estudiantes de derecho, de la Universidad Francisco González de la Vega, un poco apenadas por no “estar informadas”, manifestaron su ignorancia y no quisieron opinar.
Berenice Sustaita Castañeda, quien es asistente médico, alegre comentó que tanto como trabajadora que como derechohabiente, estaba contenta con la resolución a la que llegaron sus dirigentes sindicales con los representantes del instituto, “es que tengo una hija que está enferma y necesita atención médica inmediata y de haberse dado la huelga, seguramente todos estaríamos viviendo tiempos muy difíciles”.
Mayor atención
Derechohabientes del IMSS en Torreón también consideraron un alivio para los mexicanos el que no se haya presentado la huelga en la institución, aunque señalaron que el Gobierno Federal debe prestar una atención especial a las demandas de los trabajadores.
Micaela Rayos, procedente de Ciudad Juárez, Chihuahua, destacó que “a todo el mundo le hubiese afectado” que el Instituto paralizara sus actividades.
Desde hace tres años, su hijo sufrió un accidente de trabajo y a consecuencia de ello, desde hace algún tiempo tiene la necesidad de acudir a rehabilitación al Hospital General de Zona Número 16 de esta ciudad.
En este sentido, señaló que según lo que habían dicho los trabajadores sindicalizados, no se descuida-ría la atención a las personas que se mantienen internadas por algún padecimiento o quienes acuden a terapias, aunque para los familiares de los hospitalizados esto no les daba mayor tranquilidad, tomando en cuenta que el resto de los servicios serían suspendidos.
Manifestó que cada dos meses ella y su hijo tienen la necesidad de acudir hasta esta ciudad para continuar con el proceso de rehabilitación, de manera que hubiese sido fatal para ellos tener que suspender el tratamiento a consecuencia de un conflicto de carácter laboral en la institución.
Demandas añejas
Para Jesús Gómez Martínez, quien se encuentra incapacitado desde hace más de un mes, el servicio que en la actualidad está proporcionando el Seguro Social es aceptable tratándose de la atención en especialidades y cirugías mayores, pero sigue adoleciendo de algunas deficiencias relacionadas con el desabasto de medicinas y una sobrecarga laboral para sus trabajadores, por la gran demanda que hay de este servicio.
Consideró que el movimiento que en todo el país desplegaron los trabajadores, debe llamar la atención del actual Gobierno Federal para que se atiendan todas estas carencias, pues los mexicanos no tendrían ninguna otra alternativa en caso de que éstos decidieran estallar la huelga.