SALTILLO, Coah.- Luego de más de cinco horas de discusión, anoche no se llegó a ningún acuerdo que permitiera destrabar el conflicto político que vive el municipio de Hidalgo, Coahuila, entre panistas y priistas, por lo que seguirá tomada la alcaldía por parte de militantes del tricolor, quienes la mantienen bloqueada desde el lunes 15 de este mes, para pedir la destitución del alcalde Fernando Duarte Flores, quien ayer estuvo a punto de ser linchado por el bando que está en su contra.
Como lo informó EL SIGLO oportunamente, un grupo de más de 100 personas del PRI, encabezadas por el síndico Mauro Gaspar Medellín, tomaron el 15 por la noche, luego de la ceremonia del ?Grito?, la alcaldía para obligarlo a que renunciara al cargo, al considerar que se ha aprovechado de los recursos públicos para su beneficio personal.
Desde entonces, no se ha entregado la alcaldía y el municipio de Hidalgo afronta una crisis de ingobernabilidad y de falta de recursos para el pago de su personal.
Motivados por la falta de solución, ayer los dos grupos antagónicos, por separado acudieron al Congreso, para solicitar la intermediación de los legisladores. En determinado momento se cruzaron los priistas con el alcalde Duarte Flores, a quien lanzaron insultos e intentaron alcanzar para agredirlo, pero el edil huyó por una de las puertas traseras del edificio legislativo.
Una comisión especial del Congreso, compuesta por varios legisladores de los partidos representados en la legislatura se reunió con los bandos en conflicto.
Primero, escucharon a los ?duartistas? en una reunión a puerta cerrada que duró por espacio de casi dos horas, en la que no se llegó a ningún acuerdo.
A la salida de esta primera reunión, el alcalde fue abordado por la prensa para conocer el resultado de la junta, pero bastante nervioso Duarte Flores, dijo que no se había llegado a ningún acuerdo, y que su permanencia en el cargo o su renuncia dependería de lo que el Congreso acordara con la otra parte, o sea con sus contrarios.
En cuanto al resultado de la segunda reunión de los legisladores y la otra parte en pugna, o sea los priistas, tampoco hubo acuerdos substanciales que pudieran terminar con el conflicto.
El diputado de la UDC, Evaristo Lenin Pérez Rivera, participante en las pláticas conciliatorias, dijo que por lo pronto hay elementos sólidos para iniciarle una auditoría al alcalde hidalguense, considerando que hay renglones donde no hay un manejo claro de los recursos, como es el caso de renta de maquinaria pesada a precios inflados.
Ambas reuniones, no lograron que los priistas cedan en su empeño de sacar de la alcaldía a Duarte Flores; ni que los panistas dejaran su postura de que permanezca en el cargo.