TORREÓN, COAH.- El sistema fiscal aplicado por la Secretaría de Hacienda, donde prevalecen los cambios en las leyes tributarias, ocasiona alta complejidad y ambigüedad en sus preceptos, por lo que se hostiga permanentemente a los contribuyentes a pesar de que cumplen con sus obligaciones fiscales.
Raúl Rodríguez Vidal, presidente de la Academia de Derecho Fiscal en Coahuila, participante en el Congreso de Derecho Fiscal Nacional, sostuvo lo expuesto y añadió que el uso de máquinas de comprobación fiscal, pagos a través de medios electrónicos, requerimientos de la Ley del Impuesto Sobre la Renta y deducciones, son algunas normas vigentes que deben cumplir los contribuyentes y que sitúan en un estado de indefensión frente al fisco federal.
Algunos ejemplos claros de la indefensión, es la declaratoria inconstitucional por parte de la Suprema Corte de Justicia de la obligatoriedad del contribuyente de usar máquinas de comprobación fiscal, pero nuevamente están en la Ley Fiscal; otro ejemplo es la inseguridad en el pago de impuestos vía medios electrónicos, ya que el Código Fiscal Vigente no prevé este nuevo sistema de pago, la inseguridad radica en que este medio de pago no puede ser usado en un juicio como una herramienta legal contra el fisco.
Tomando en cuenta lo expuesto, las empresas que imprimen comprobantes de pago por Internet en el portal de los bancos porque piensan que les servirá en un juicio fiscal, están equivocadas ya que ese comprobante es una copia simple y en un tribunal estos papeles no tienen valor probatorio.
Por otra parte, Rodríguez Vidal fue cuestionado sobre los beneficios de la Reforma Fiscal en el presente año y consideró que trajo escasos apoyos para las personas físicas, concentrándose en precisiones de reglas y modificaciones aprobadas desde el 2001, como la reducción de un punto porcentual en la tasa máxima del Impuesto Sobre la Renta.
En el caso de las empresas, las bondades de la reforma fiscal también resultaron mínimas y el escenario se complica aún más si se toma en cuenta que Hacienda pide un caudal de requisitos para que las personas puedan echar mano de las ventajas ofrecidas para este ejercicio fiscal.
“Los grandes pagadores de este impuesto son los trabajadores asalariados, que fácilmente llegan a los niveles altos de la tasa, pero estos contribuyentes enfrentan ahora mayores acotaciones por previsión social”.
En relación a la economía informal, donde se encuentran los contribuyentes no registrados, evasores dolosos y “evasores legales”, aseguró que le causan un gran daño al país, al no captar ingresos indispensables para destinar a los servicios públicos.
Cabe precisar que varios especialistas fiscales señalan a este sector informal como un mito, precisando que realmente son más los ingresos que no se captan de grandes contribuyentes, quienes de acuerdo a nuestro marco fiscal gozan de múltiples beneficios, privilegios o estímulos que hacen de una Ley inequitativa en relación a los contribuyentes cautivos, asalariados y en especial de la clase media.
Por lo anterior, es necesario un replanteamiento de nuestro sistema fiscal, a través de la tan llevada y traída reforma hacendaria que resulte de los acuerdos de los diferentes actores políticos, sociales y productivos que sean considerados en una convención nacional hacendaria.
Simultáneamente se ha propuesto la creación de un órgano fiscal técnico, con autonomía para determinar las participaciones entre los diferentes niveles de gobierno y que exista más transparencia en la aplicación de recursos públicos, rindiendo cuentas de los mismos.
Sobre la mejor forma que tiene un contribuyente para protegerse de las leyes fiscales ambiguas e inconstitucionales, dijo que la única opción es la más costosa y consiste en la interposición de un juicio de amparo; el juicio es confiable, pero implica un alto costo económico y tiene ciertas desventajas para el contribuyente, por ejemplo el causante debe seguir cumpliendo sus pagos al fisco aun cuando esté inconforme, situación que prevalece mientras la Corte no declare inconstitucional el impuesto contra el que el contribuyente busca protección de la justicia.
El abogado fiscalista, con estudios de maestría en Derecho Fiscal, explicó que si el contribuyente pierde el juicio en contra de la Secretaría de Hacienda, tiene que pagar los impuestos que le determine esa autoridad, incluyendo actualizaciones y recargos, pero si la autoridad pierde, el contribuyente no podrá exigir a las autoridades la indemnización de los daños que le causó como causante.
Finalmente, el presidente de la Academia de Derecho Fiscal en Coahuila, se refirió a las propuestas presentadas en el congreso nacional y mencionó que se apoyará la creación de la figura del Procurador de la Defensa del Contribuyente, como una alternativa para promover la certeza y seguridad jurídica, a través de la orientación y asesoría al contribuyente, el cual carece en la mayoría de las veces de una Ley Fiscal accesible y simple para su cumplimiento, a través de recomendaciones públicas no vinculatorias.
Otra propuesta es la promoción de la celebración de la Convención Nacional Hacendaria, lo más pronto posible, con la participación de todos los sectores productivos, sociales y que se continúe con el análisis del proyecto del Nuevo Código Fiscal de la Federación, el cual fue aprobado por la H. Cámara de Diputados y que en la actualidad es discutido por la Cámara de Senadores, buscando la tan ansiada simplificación administrativa, certeza y seguridad jurídica que fomenten el cumplimiento fiscal en beneficio de la recaudación tributaria.