POR MARÍA ELENA HOLGUÍN
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Regidores solicitaron la intervención del Congreso del Estado para que los directivos del Hospital Universitario sean más flexibles en la aplicación de descuentos sobre las cuotas de recuperación de los usuarios de los servicios médicos que presta, lo cual no se ha logrado después de casi un año de gestiones.
El séptimo regidor, Roberto Sánchez Viesca, dijo que la solicitud se hizo a través de la Comisión del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del Ayuntamiento y se espera obtener una respuesta de los legisladores locales a más tardar el próximo día 15; de igual forma, se dirigió un documento al Gobernador de la entidad para enterarlo del caso.
El pasado lunes se sostuvo una reunión con la coordinadora de la Unidad Torreón de la Universidad Autónoma de Coahuila, Rosa María Franco, quien se comprometió a plantear al Rector la posibilidad de trabajar en forma coordinada con el Municipio en un convenio para atender esta demanda.
El Edil, quien también forma parte de la Comisión de Salud, refirió vía telefónica que desde hace casi un año, los regidores han estado gestionando ante las autoridades del nosocomio, la aplicación de descuentos a personas de escasos recursos económicos que hicieron uso de los servicios médicos.
Inicialmente, recordó, los directivos del Hospital mostraron cierta disposición al diálogo pero la actitud fue otra conforme la insistencia de los ediles; en últimas fechas, dijo Sánchez Viesca, el subdirector médico de la institución, Manuel Delgado Gaona, fue despótico y prepotente con los regidores, al grado de solicitarles que en lugar de enviarles gente o recomendaciones hicieran llegar dinero para subsanar los gastos.
El director, Ernesto René Pérez Verti, se comprometió en una ocasión a escuchar las propuestas de los regidores pero nunca los atendió.
El integrante de la Comisión del DIF manifestó que diariamente, los regidores reciben en sus oficinas a un promedio de dos o tres personas que acuden a solicitar la intervención de éstos para aplicárseles descuentos en las cuentas de hospitalización y otros servicios del Hospital Universitario.
En ocasiones se trata de 25 a 30 mil pesos los que una persona de baja condición económica debe cubrir ante la institución pero sólo tiene la posibilidad de pagar dos o tres mil pesos.
Incluso, los propios solicitantes han manifestado que las encargadas del departamento de Trabajo Social del Hospital se han negado rotundamente a la solicitud de una rebaja, pero sin embargo les han recomendado acudir con los regidores y “hasta pedir limosna” para saldar las cuentas, refirió Sánchez Viesca.
A través de la Comisión del DIF e instituciones como Cáritas, los familiares de algún paciente pueden reunir hasta mil pesos como ayuda, pero el Hospital los hace firmar pagarés por el resto del adeudo, con la advertencia de que pueden ser embargados de sus bienes si no cumplen en la fecha establecida.
“Se ha llegado al extremo de impedir la salida de pacientes si no pagan la cuenta, lo que es anticonstitucional”, comentó.
Ante esta situación, Roberto Sánchez Viesca dijo que el principal fin de la institución es de enseñanza y de servicios a la comunidad, aspecto último que se ha perdido toda vez que los encargados pretenden darle un manejo similar al de un hospital privado.
Convenio
En forma insistente, los integrantes de la Comisión del DIF del Ayuntamiento han solicitado informes sobre los subsidios que el Hospital Universitario recibe del Gobierno Estatal y si tienen algún otro apoyo de parte de la Federación, con la idea de generar un convenio mediante el cual se puedan “bajar” recursos de algunos programas municipales para apoyarlos; todo ello en virtud del argumento de los directivos de que en términos financieros están “quebrados”.
Sin embargo, la negativa ha sido rotunda amparándose en la supuesta autonomía de que goza la institución hospitalaria.
La intención de los regidores no es perjudicar al Hospital, sino establecer la firma de ese convenio que pudiera contribuir a aportarles recursos municipales, de manera que estén en condiciones de apoyar a la gente de escasos recursos, la que regularmente acude ante estas fundaciones porque no está afiliada a ninguna institución de salud y carece de alguna otra alternativa.
Las cuotas de recuperación son considerables y lo son un tanto más aquéllas que se aplican a quienes utilizan las áreas de internamiento privadas.
Hace algunas semanas, el Municipio donó equipo médico para las brigadas de la institución que recorren colonias y ejidos.
“El hospital se debe a la comunidad y ésta debe tener una respuesta cuando lo requiere”, refirió Sánchez Viesca.