Somos personas muy trabajadorasy creativas, opinan jóvenes laguneras
TORREÓN, COAH.- El nacionalismo no sólo se despierta en fechas como el 16 de septiembre o el 20 de noviembre, Día de la Independencia y de la Revolución Mexicana, respectivamente. El orgullo de ser mexicanos está siempre presente.
Así lo demostraron las jóvenes de la Universidad La Salle (ULSA) Laguna, quienes platicaron acerca de sus convicciones y sentimientos que les provoca el pertenecer a la raza azteca.
Lorelay Cevallos Pérez Verti, Judith Hernández Sada, Myriam Martínez, Olga Ruiz Yaguno Valenzuela y Roberta Cárdenas Sánchez, estudiantes del cuarto semestre de psicología, definieron la personalidad del mexicano, de acuerdo a la carrera que eligieron.
¿Qué es lo que más te gusta de ser mexicana?
?Para empezar el hecho de que nunca me ha tocado vivir una guerra, que todo lo he visto a través de los medios, no he sido ni protagonista y no he estado cerca?. Eso es lo que opina Lorelay.
Judith, por su parte, asegura que lo que más le gusta es la libertad de expresión que se da en México, pero sobre todo, ?que no somos un país conflictivo?.
Para Myriam, lo que más le llena de orgullo es que ?es un país lleno de muchas tradiciones y de mucha cultura, un país muy rico en este aspecto y que tiene potencial?.
Olga opina que ?somos una cultura muy rica, tienes de todo: Cocina, arquitectura, arte, poesía, mil cosas?.
Mientras que para Roberta, lo más importante es la tranquilidad que se vive en el país.
¿Y lo que menos te agrada?
?Que tengamos el estereotipo de los flojos, o tercermundistas, de los que no podemos; es una etiqueta que nosotros mismos nos la hemos puesto, pero ya es mundial?, señala Lorelay.
La discriminación de la que a veces es objeto un mexicano fuera del país, y el estereotipo del machismo, son dos de los aspectos que menos le gustan a Judith del ser mexicana.
?Creo que en los últimos años hemos caído en la mediocridad, y eso ha generado una depresión general en todo el país. Además, nos falta un poquito de más iniciativa para hacer las cosas?, opina Myriam.
Por su parte, Olga es muy feliz siendo mexicana. Para ella, el único inconveniente de serlo son los gobernantes que se han aprovechado de su posición y han empobrecido al país.
Y para Roberta, la violencia que se vive actualmente es uno de los factores negativos del mexicano, lo mismo que la discriminación y menosprecio que obtiene al viajar al extranjero.
¿Cómo es la personalidad del mexicano?
?Yo creo que somos una nación que está creciendo, estamos en un excelente momento, se nos está dando un campo de acción mucho más grande al que se daba antes, simplemente estamos en el mejor momento para crecer?. Así piensa Lorelay, quien afirma que antes que nada, el mexicano es generoso y tiene la capacidad de empatía: De ver por lo que está sintiendo el otro, de ponerse en el lugar del otro y ayudarlo.
Un rasgo distintivo de la personalidad del mexicano, según Judith, es la mediocridad y el conformismo: ?Con que nos vaya un poquito bien, ya con eso nos conformamos y no seguimos superándonos?.
El mexicano es una persona muy alegre y con muchas ideas muy creativas, pero que le falta dar ese paso para hacerlas. Eso es lo que opina Myriam.
Olga asegura que el trabajo es algo que no asusta al mexicano. Otro rasgo que lo define, según ella, es que ?somos muy decididos?.
Conformista, impuntual y mediocre, son características que definen al ser mexicano.
¿Cómo califican al mexicano en el extranjero?
México igual a flojera, con el charrito con su sombrero flojeando, asegura Lorelay.
Como un país muy pobre, inculto y con muy poco potencial, opina Myriam.
Según Olga, ?nos ven con un nopal dibujado en la frente, nos creen capaces nada más para lo que es la mano de obra, y no ven todo nuestro potencial?.
Y Roberta afirma que ?en otros países califican al mexicano como un indio, y como una persona sin educación?.
¿Qué se necesita para cambiar esa visión?
?Posiblemente preparación académica ?asegura Lorelay-, ciertamente la tecnología que tiene el país y los medios no son de primer mundo, no son de punta, a lo mejor como Alemania o Estados Unidos, yo creo que estamos muy atrasados en tecnología y eso a lo mejor nos impide estar a ese nivel?.
Lo que se requiere es ?dejar de hacernos daño unos a otros, es mejor apoyarnos?, afirma Judith.
?Ponernos todos a trabajar, y demostrar que somos más de lo que piensan?, es lo que se necesita para cambiar la opinión que tienen de los mexicanos en el extranjero, según Myriam.
Pero Olga va mucho más allá. Ella cree que la opinión de otros países no está fundamentada, por lo que les recomienda ?que vengan a ver que México es más que un cerro con indios, vacas y burros; México es una nación que se ha desarrollado mucho?.
Y por último, Roberta le apuesta a la educación, pues ella cree que la situación y la visión que otros países tengan de México sólo se va a mejorar, cuando se promuevan programas de investigación.
La diversidad cultural, otra característica
Rocío Moreno Gutiérrez afirma que la diversidad cultural, manifestada en todas las etnias y los diferentes dialectos que se hablan en cada zona geográfica, son aspectos característicos del país azteca.
La estudiante del cuarto semestre de psicología, opina que no se ha sabido aprovechar ésta, pues se opta por el malinchismo: ?El mexicano busca más la cultura del extranjero y no promueve la suya, no conoce muchas veces las culturas de los propios Estados del país o de la misma región?.
Para la joven de 19 años, el mexicano es muy creativo, aunque esa misma creatividad lo hace en cierto modo ser conformista con su situación, porque se confía de sus capacidades, y no logra desarrollarlas.
El mexicano tiene todo para salir adelante, pero necesita concientizarse de sus capacidades y lograr una autonomía para desarrollarse, sin depender de otras potencias, como Estados Unidos, opina.
?La posición pacífica de México se ha mantenido desde siempre, y creo que continuar con ella es una manera de demostrar que no importa cuán influenciado se encuentre por otras potencias extranjeras, sino que es más importante la convicción que se tenga sobre la paz?, concluyó.
UN MENSAJE DE PAZ
Independientemente de las represalias económicas y de cualquier otro tipo, las entrevistadas coincidieron en apoyar la postura pacifista que el gobierno mexicano ha manifestado.
LORELAY: Estoy a favor de la paz. A lo mejor no va a servir de mucho, de hecho estoy casi segura que no va a servir de nada, pero al menos debemos externar nuestro desacuerdo e inconformidad con la guerra.
ROCÍO: Por principio, la paz nos hace más fuertes como sociedad, porque no caemos en el juego de la agresión al otro por responderle. Esto nos va a traer como consecuencia que crezcamos más como nación; si tenemos la base del pacifismo, podemos concentrarnos más en otras cosas como la producción y el crecimiento económico y cultural.
JUDITH: -Que sólo con oraciones vamos a poder que tomen una mejor actitud las personas que están en la política, que está en sus manos seguir con la guerra o detenerla.
MYRIAM: Agresión crea más agresión, y entre más se lastime a la gente, van a producirse resentimientos y van a querer desquitarse. Entonces la única manera de lograr el cambio es con la paz.
OLGA: No hay mejor guerra que aquélla que deja de lado a la violencia, lo mejor es hablar las cosas. Ésta no es una guerra para salvar al mundo, es una de intereses y la verdad qué triste.
ROBERTA: Creo que el mejor mensaje de paz que puedo dar es que exista diálogo ante todo.
FUENTE: El Siglo de Torreón.