EFE
LOS ÁNGELES, EU.- El Retorno del Rey, la tercera entrega de El Señor de los Anillos, pone fin a una saga que comenzó como un imposible y ha concluido creando una franquicia capaz de generar más de tres mil millones de dólares.
Con el estreno mundial previsto para el 17 de diciembre, los primeros pases del que ya se considera un clásico, no sólo de la literatura sino del cine, cimientan la admiración creada desde hace tres años por la obra dirigida por Peter Jackson.
"Al principio no podíamos anticipar que la pasión de los lectores se extendería de esta forma al resto del público", ha reconocido el actor Ian McKellen retomando el papel del sabio Gandalf.
"Con la tercera ya sabemos que es una especie de fiebre que marca el final de la trilogía pero no de la película, que ya es un clásico con vida propia", confirma.
Una cinta que dura más de tres horas y ata los cabos sueltos que quedaron en la segunda entrega de la obra de J.R.R.Tolkien.
Sin embargo El Retorno del Rey arranca de un flash-back, un recuerdo cinematográfico del que se ha convertido en el personaje más popular de la serie, el monstruoso Gollum, para mostrar el proceso que le ha convertido en esta criatura.
Él está guiando a Frodo (Elijah Wood) y a Sam (Sean Astin) al corazón de Mordor para que destruyan el anillo del mal aunque sus pasos van derechos al nido de Shelob, la araña gigantesca.
Mientras, el resto de los miembros de la comunidad del anillo siguen combatiendo las fuerzas del mal de Sauron que se multiplican hasta extremos imposibles en la batalla de Gondor y cuya única y última esperanza de supervivencia para la humanidad reside en el pequeño hobbit y su misión de destruir el anillo.
Dado el título y la gran cantidad de lectores de la obra de este autor sudafricano a nadie le tomará por sorpresa saber que al final el bien triunfa sobre el mal y Aragorn (Viggo Mortensen) llegará a su destino como rey.
Pero como el propio Mortensen reconoce, la película es la historia del anillo, no del reinado de su personaje, así que hay muchas partes de la novela que no han llegado al último montaje.
De hecho Jackson reconoce que su primer montaje del filme fue de más de cuatro horas y media de duración, "más de lo que cualquier ser humano puede aguantar sentado en el cine".
Entre otros detalles de El Retorno del Rey ha desaparecido la figura del sabio del mal Saruman (Christopher Lee), que seguirá en la torre encerrado sin que el público le vuelva a ver, o gran parte del triángulo amoroso entre Eowyn (Miranda Otto), Aragorn y Faramir (David Wenham).
Tampoco está en la película el regreso de los hobbits a su tierra natal, donde tendrán que restablecer el orden, una parte del libro que nunca le gustó a Jackson y que ni tan siquiera incluyó en el guión de rodaje.
Sin embargo estas ausencias no son más que alicientes para un público que parece estar preparado para darle a El Retorno del Rey un recibimiento similar a las dos entregas anteriores, películas que sólo en Estados Unidos han recaudado más de 650 millones de dólares en las taquillas de los cines.
Como subraya McKellen, más que de tres películas estamos hablando de seis, "de siete si incluimos la recopilación final", gracias a las versiones especiales que han sido puestas a la venta hasta el momento en DVD añadiendo gran parte de las escenas que tuvieron que desaparecer para el estreno de la cinta en el cine.
Jackson ya está trabajando en este nuevo montaje para la versión especial del DVD de El Retorno del Rey para el que el compositor de la banda sonora, Howard Shore, se ha comprometido a realizar una hora nueva de música.
Como reconoce el realizador a toro pasado, el hecho de que esta película haya llegado a ser una realidad parte de una "aberración" en la mente de Hollywood, capaz por una vez de invertir 300 millones de dólares en el riesgo de rodar tres películas a la vez con un director y un reparto de perfectos desconocidos.
El resultado ha sido el de una franquicia millonaria no sólo en la taquilla sino en cualquier otro ámbito comercial que ha recuperado con creces la inversión generando un clásico del cine que ahora sólo necesita un Oscar para su coronación.
Nueva generación estrellas
Con la llegada de El Retorno del Rey, la conclusión de El Señor de los Anillos, se abre un nuevo interrogante en Hollywood sobre el futuro de la nueva generación de estrellas nacida con esta trilogía.
-Los rostros de Elijah Wood, Vigo Mortensen e Ian McKellen se han convertido en las estrellas más populares de Hollywood, recreando un universo de hobbits, elfos, magos y orcos que han pasado a formar parte de la historia.
-No hay duda sobre el éxito taquillero de una cinta que también figura como la principal favorita al Oscar, una estatuilla a la mejor película que corone los esfuerzos de los tres filmes (hasta ahora ganadores de seis estatuillas en otras categorías).
-La incógnita se cierne sobre sus protagonistas, que han seguido el mismo camino heroico de sus personajes, pasando del anonimato a la fama y a los que les espera un salto en el vacío. "Para nosotros también ha sido un viaje con una comunidad de gente de la que hemos regresado cambiados", ha indicado Wood.
-McKellen será recordado a partir de ahora como Gandalf el mago pero su larga carrera como actor, candidato al Oscar en dos ocasiones, así como otros papeles en películas tan populares como X Men mantendrán su estatus al mismo nivel.
-Para Cate Blanchett, su colaboración como la reina Gladriel ensalzará aún más la belleza de esta australiana pero a nivel artístico su futuro es más prometedor que nunca, con otros dos estrenos este año, Veronica Guerin y The Missing, a los que ronda un aire de Oscar.
-El cambio más drástico ha sido el de Orlando Bloom, británico de 26 años prácticamente desconocido antes de ser el arquero Legolas y que ahora es el ídolo de la juventud, no sólo presente en El Señor de los Anillos sino en Los Piratas del Caribe y en su próximo estreno Troy, donde compite en belleza con Brad Pitt y Eric Bana.
-Viggo no es otro que Mortensen, a sus 45 años mucho más veterano que Bloom como actor pero igual de novato a la hora de disfrutar un cambio que le ha transformado de artista concienciado, además de músico y pintor, a ídolo de matinales en su papel del montaraz Aragorn y futuro rey de Gondor.
-Incluso los hobbits, como ellos mismos se siguen llamando, han crecido en sus estatus en Hollywood y mientras que el Pippin de Billy Boyd se ha echado a la mar para Master & Commander, los profundos ojos de Elijah Wood buscan papeles más adultos como el que ha rodado en la comedia Eternal Sunshine of the Spotless Mind, junto a Jim Carrey y Kate Winslet.
-Sean Austin también tiene varios proyectos cinematográficos pero su principal interés está fuera de la pantalla: sus dos niñas, una de ellas concebida durante el rodaje y presente en la tercera cinta, su dedicación a la poesía y a la política por partes iguales.
-El mayor salto de todos ha sido para Peter Jackson, el director de este sueño cinematográfico con el que ha pasado de ser un realizador independiente, casi desconocido, a haber firmado un contrato por 20 millones de dólares para rodar una nueva adaptación de King Kong.
FUENTE: EFE