El País
JOHANNESBURGO, SUdÁFRICA.- La noticia de que el gabinete ministerial decidió otorgar carácter de urgente a la decisión de dar el cóctel de drogas que puede salvar la vida a medio millón de personas en este país fue sorpresiva pues tan sólo el día anterior el gobierno continuaba cuestionando la decisión de entregar Nevirapine a los bebés de madres seropositivas, una droga que se da una sola vez y que baja a un 50 por ciento la posibilidad de transmisión del mal.
La corte constitucional obligó el gobierno a entregar la droga pero la ministra de salud, la doctora Manto Tshabalaang-Msimang siempre ha dicho que no cuenta con los fondos necesarios para cumplir con la orden en todo el país.
Uno de cada diez habitantes de Sudáfrica es sero positivo y las Naciones Unidas estima que la condición mata hasta mil personas al día. Casi dos millones de niños serán huérfanos para el 2010 si la gente no recibe tratamiento.
Un informe del Banco Mundial afirmó que si el gobierno no hace nada para combatir la epidemia en cuatro generaciones la economía sudafricana colapsará.
La decisión de entregar los retrovirales se dio a conocer días después de que una conferencia internacional sobre el Sida realizada en Durban criticara al gobierno por la incapacidad mostrada a la hora de implementar un plan nacional para combatir el mal.
“Ahora lo único que falta es que (el presidente) Mbeki y (la ministra) Tshabalala-Msimang den la cara y pidan disculpas a la gente”, dijo Bantu Holomisa, líder del Movimiento de la Unión Demócrata. Y se preguntó si el anunció no tiene que ver con el hecho que en abril próximo habrá elecciones presidenciales en el país.
La ministra ha mantenido una amarga disputa con ong’s y activistas rechazando la posibilidad de entregar drogas y defendiendo la política gubernamental de promover el combate del Sida a través de “dietas nutritivas”. Ella ha dicho en el pasado que los retrovirales son “veneno” y que una combinación de ajo, cebollas, aceite de oliva y la patata africana fortalecería el sistema inmunológico de la gente con sida.
El anuncio gubernamental no fue acompañado de un plan. El plan será dado a conocer a fines de septiembre cuando la Fundación Bill Clinton junto con la Fundación Nelson Mandela y el gobierno den a conocer cómo se espera entregar las drogas.
El presupuesto de este año destinó 3.3 mil millones de rands, unos 398 millones de euros, al combate del Sida. El gobierno sudafricano recibió otros 35.9 millones de dólares del Fondo Global de las Naciones Unidas con el mismo fin, tras dos años de disputas sobre cómo debería invertirse dicha suma.