“José Ramón Hernández Meraz fue un gran rector. Supo estabilizar a la Universidad Juárez del Estado de Durango en momentos muy difíciles. Es de los mejores hijos que ha dado la Máxima Casa de Estudios”, opinó Maximiliano Silerio Esparza, ex mandatario estatal de Durango.
Al llegar al atrio del Templo de San Juanita de los Lagos, donde se encuentra la tradicional fachada del Edificio Central de la UJED, reconoció que durante parte de su periodo como gobernador la Universidad Juárez padecía fuertes problemas de división y crisis.
Sin embargo, resaltó que con la llegada de Hernández Meraz, en 1994, la tendencia negativa empezó a cambiar para bien de la comunidad universitaria, pues José Ramón puso orden desde el inicio.
“A nueve años de incursionar en la Rectoría de la Máxima Casa, el rector Hernández Meraz deja un legado fuerte de unidad y de trabajo a los universitarios de Durango; también de nivel académico y de muchas otras virtudes. Su obra fue extraordinaria en la institución”, expuso.
Silerio Esparza, quien fue el titular del Ejecutivo estatal de 1992 a 1998, consideró que las grillas internas de la Universidad Juárez en estos momentos tras el fallecimiento del Rector, siempre han existido y seguirán existiendo en toda democracia.
El Siglo de Durango trató de cuestionarlo sobre aspectos políticos de relevancia en la entidad que atañen a las elecciones para diputados federales y a su partido, el PRI, empero, dijo que no quería hablar de ese tema sino hasta después del 6 de julio próximo, fecha de las votaciones.