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MÉXICO, DF.- Andy Roddick, Roger Federer, Juan Carlos Ferrero y Guillermo Coria fueron los jugadores con mayor brillo durante la temporada 2003 de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), en un circuito que sigue en pleno proceso de relevo generacional.
Fuera de los "Cuatro Fantásticos de 2003", cuyo promedio de edad es de 22 años, sobresalió un veterano, nada menos que el estadounidense Andre Agassi, único treintañero de la campaña entre los diez primeros de la clasificación mundial, en un importante cuarto sitio.
2003 fue además el primer año de la era "Después de Sampras", quien a los 32 años de edad decidió retirarse de las canchas tras una carrera con toda clase de récords que lo pusieron en el selecto grupo de los mejores tenistas de la historia, aunque para muchos, él es el mejor.
Pete Sampras, quien nació el 12 de agosto de 1971 en Washington, D.C., Estados Unidos, dominó a placer la ATP en la década de 1990 y puso fin a su trayectoria luego de ganar 64 títulos (el cuarto mejor en la era de los abiertos) y 43 millones 280 mil 489 dólares (líder en ganancias en la historia del tenis).
"Pistol Pete" dijo adiós al deporte blanco como el máximo ganador en la "Open Era" de títulos de Grand Slam, con un total de 14: dos en el Abierto de Australia, siete en los Campeonatos de Wimbledon y cinco en el Abierto de Estados Unidos.
Impuso el récord de terminar seis años al hilo, de 1993 a 1998, mismos en los que ganó el premio al Jugador del Año de la ATP, como el número uno del mundo, y el de semanas totales al frente del ranking mundial, con 286.
Se adjudicó 11 torneos de Serie de Maestros y cinco veces la Copa de Maestros como parte de la marca del jugador con más triunfos en los años 90s. El admirador del tenista australiano Rod Laver logró 762 victorias, a cambio de 222 derrotas, en 16 años como profesional.
En realidad, Sampras estaba retirado desde el nueve de septiembre de 2002, un día después de que venció a su compatriota Andre Agassi en la final del US Open, torneo en el que un año después y sin un partido en 12 meses hizo oficial su despedida.
Así, en un simbólico 2003 por ser la primera temporada de la era post Sampras, otro jugador estadounidense, Andy Roddick, dio el paso que de él se esperaba desde que brillaba como juvenil y terminó la campaña en la cima del ranking, el segundo más joven en lograrlo.
El nativo de Omaha, Nebraska, quien fue número uno del orbe como juvenil en 2000, llegó a mayo pasado sin título alguno en la temporada, pero rompió la mala racha en la arcilla de Saint Poelten, Austria, y luego se coronó en el césped de Queen’s, Inglaterra.
Ya sobre canchas duras, se proclamó campeón en Indianápolis e hilvanó los títulos de los Masters de Montreal y Cincinnatti, para culminar su triunfal marcha con el título del Abierto de Estados Unidos, su primero de Grand Slam.
Roddick, de 21 años de edad, fue superado, sin embargo, en récord (72-19), ganancias (tres millones 227 mil 342 dólares) y títulos (seis), por el suizo Roger Federer, quien concluyó la campaña con marca de 78-17, siete trofeos de campeón y cuatro millones 680 dólares.
Federer, de 22 años y quien también fue número uno del mundo como juvenil, en 1998, se coronó en Marsella, Francia; Dubai, Emiratos Árabes Unidos; Munich y Halle, Alemania; Wimbledon, Inglaterra; Viena, Austria, y Houston, Estados Unidos.
El hecho de ser el primer suizo en ganar un Grand Slam (Wimbledon) lo convirtió automáticamente en el mejor tenista en la historia de su país. Su labor en 2003, al superar la cantidad de títulos que había ganado en los cinco años precedentes, lo impulsaron a terminar en la segunda posición en los listados de la ATP.
El originario de Basilea culminó su gran temporada como campeón de la Copa de Maestros, en Houston, donde se dio el lujo de derrotar a los otros monarcas de Grand Slam en 2003: el español Juan Carlos Ferrero (Francia), Roddick (Estados Unidos) y en la final a Agassi (Australia), con un nivel tenístico superior al cien por ciento.
Juan Carlos "Mosquito" Ferrero, de 23 años, saboreó a su vez durante algunas semanas lo que significa ser el número uno del orbe, honor que sólo había alcanzado un español antes que él, Carlos Moyá, pero en una Copa de Maestros para el olvido le dejó la vía libre a Roddick.
Aún así, Ferrero quedó en el tercer puesto del ranking mundial, tuvo números de 67-21 y cosechó tres millones 26 mil 760 dólares, además de cuatro títulos, de los cuales uno fue de Grand Slam (Roland Garros) y dos de Masters Series (Montecarlo y Madrid).
El tenista de Onteniente llegó además a la final del Abierto de Estados Unidos y desarrolló sobre superficies rápidas un tenis que hizo olvidar aquello de que los españoles sólo destacan en la tierra batida.
Completó el grupo de los "Cuatro Fantásticos" el carismático argentino Guillermo Coria, quien a sus 21 años de edad demostró por qué lo apodan "El Mago", pues es precisamente magia lo que sale de la raqueta de este pampero con cara de niño nacido en Rufino.
Coria ganó cinco torneos en 2003 (sólo abajo de los siete de Federer y de los seis de Roddick, y arriba de los cuatro de Ferrero y de Agassi), de los cuales uno es de Masters Series (Hamburgo, Alemania). Su récord fue de 60-16 y un millón 971 mil 162 dólares.
El impacto del "Mago" en el tenis albiceleste se puede apreciar mejor si se toma en cuenta que ningún argentino terminaba un año dentro del "Top Five" desde 1982. Coria finalizó este 2003 en el quinto puesto. En 1982, Guillermo Vilas concluyó en la cuarta plaza.
Así, estos cuatro jugadores se tomaron en serio lo del relevo generacional y lo de empezar a escribir hazañas en la época post Sampras, aunque en el cuarto lugar del ranking se les coló Agassi, quien a los 33 años se niega a dejar de practicar tenis de élite.
El "Kid de Las Vegas" ya no tiene nada que demostrar, pues cuenta con un sitio seguro entre los mejores de la historia. Verlo jugar a un altísimo nivel a su edad es un lujo para los amantes del deporte blanco, porque regala calidad en donde se para.
Agassi es eso, calidad. Sólo jugó 57 partidos en el año (por 91 de Roddick, 95 de Federer, 88 de Ferrero y 76 de Coria). Su foja fue de 47-10 y dos millones y medio de dólares, que pondrá en una cuenta que totaliza 28 millones de dólares, sólo superado por Sampras. El Kid obtuvo en Australia su octavo Grand Slam y en Cayo Vizcaíno su decimosexto Masters Series, serial del que es el máximo ganador.
Se quedaron un poco atrás el alemán Rainer Schuettler (seis), el español Carlos Moyá (siete) y el argentino David Nalbandián (ocho), quienes tienen la capacidad de vencer a cualquiera, mientras dos ex números uno del mundo, el brasileño Gustavo Kuerten y el australiano Lleyton Hewitt, esperarán a 2004 para reponerse de una mala temporada.