TORREÓN, COAH.- Si bien no es grave el problema de “narcomenudeo” que se vive en el medio rural, la labor realizada por algunos trabajadores del volante puede ocasionar que el problema escape de las manos de las autoridades, por lo que la vigilancia se ha reforzado en los sitios catalogados como conflictivos, dijo Rafael Sayavedra Romero, comandante de la Policía Preventiva del Estado (PPE).
Es importante que las acciones desarrolladas sean efectivas a fin de evitar que el problema crezca y luego salga de control, aseveró.
Quienes están fomentando esta ilícita actividad, son algunos de los choferes de taxis de las diferentes líneas, que aprovechando que traen a su cargo un auto del servicio público, pasan desapercibidos y así efectúan la venta de droga.
Para ello, se llevan a cabo operativos en forma permanente en las diferentes comunidades donde se han detectado con mayor frecuencia casos de personas en posesión de envoltorios con polvo blanco semejante a la cocaína, manifestó.
Reiteró que el problema no es grave, pero hizo hincapié que debe ponerse atención para prevenir una situación más seria, por lo que elementos de la corporación tienen la instrucción precisa de detener toda aquella persona que por mínima que sea, lleve cierta cantidad de estupefacientes.
Hace algunas semanas, detrás de un camión iba un taxi donde se detuvo a un sujeto en posesión de una bolsa con buena cantidad de polvo blanco al parecer cocaína, mismo que fue turnado a disposición del Ministerio Público de la Federación.
La instrucción superior es que la vigilancia se refuerce y con ella la posible captura, ya sea de “puchadores” o compradores de enervantes, concluyó.