Washington, (EFE).- La crioterapia de mama es un procedimiento seguro y casi sin dolor que reduce significativamente los tumores benignos sin dañar la estructura mamaria, según un estudio.
El estudio fue presentado en la reunión anual de la Sociedad Radiológica de América del Norte por el autor principal de la investigación, hPeter Littrup, profesor de radiología, urología y oncología en la Universidad estatal Wayne, de Illinois.
"Las pacientes salen del consultorio por su propio pie media hora después de que se haya completado la crioterapia", dijo Littrup.
La crioterapia para los adenomas fibrosos en las mamas, o tumores fibrosos benignos, es un procedimiento guiado por ultrasonido que usa temperaturas excepcionalmente bajas que congelan y matan el tejido anormal.
Los radiólogos que aplican el procedimiento primero anestesian el tejido del pecho en torno a la masa del tumor e insertan una sonda similar a una aguja larga en el centro de la lesión.
En el extremo de la sonda se forma una bola helada que continúa creciendo hasta que la imagen de ultrasonido confirma que todo el tumor está cubierto y el tejido ha muerto.
Littrup dijo que la crioterapia para los adenomas de mama tiene tres ventajas.
"El primer beneficio es la visualización", explicó Littrup durante la asamblea que se lleva a cabo en Chicago. "El hielo se ve fácilmente tanto con el ultrasonido como con la tomografía computarizada".
En segundo lugar, según el investigador, el tratamiento prácticamente no provoca dolor debido a que el área en torno al tumor se insensibiliza con una anestesia local. La tercera ventaja es el resultado cosmético.
"La crioterapia preserva la arquitectura de sostén del pecho, o colágeno, y no deja cicatrices quirúrgicas significativas", añadió Littrup.
Estimulados por los resultados prometedores del estudio en los tumores de mama, los radiólogos del Karmanos Cancer Institute en Detroit, donde también trabaja Littrup, han empezado a usar la crioterapia para el tratamiento de otros tumores.
Los investigadores, según el estudio presentado por Littrup, han tratado 42 fibroadenomas en 27 pacientes con crioterapia guiada por ultrasonido a fin de evaluar los resultados y la aceptación entre los pacientes de ese procedimiento para eliminar los tumores que, originalmente, se habían asignado para extirpación quirúrgica.
No hubo complicaciones mayores y las pacientes se mostraron complacidas con el resultado cosmético.
Los fibroadenomas de mama, que afectan al 10 por ciento de las mujeres en EEUU, en su mayoría entre los 15 y 25 años, en general se consideran lesiones que no requieren un tratamiento. Las mujeres negras presentan una incidencia de estos tumores casi dos veces mayores que las blancas.
Sin embargo cada año se extirpan quirúrgicamente alrededor de un millón de estos tumores debido a su tamaño, su crecimiento constante o por razones cosméticas.