El cañón “La Pintada’’ atesora las expresiones gráficas rupestres más valiosas del noreste de México
NOTIMEX
MÉXICO, DF.- Ubicado en Hermosillo, Sonora, el cañón natural La Pintada, donde se concentra una de las expresiones gráfico rupestres más importantes del noroeste del país, es motivo de programas permanentes de protección técnica y legal por parte del Centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Localizado al sur de dicha entidad, en él quedaron registradas figuras zoomorfas, venados, reptiles y aves, así como muestras antropomorfas, algunas adornadas con cuernos y pieles de animales, y otras con los brazos en alto como en actitud de imploración o danza.
Armando Rodríguez, arqueólogo a cargo de los trabajos de conservación de La Pintada, advirtió la necesidad de recuperar el lugar no sólo por su valor arqueológico, sino inclusive como un sitio ecológicamente activo.
Además de contar con pinturas rupestres ha sido punto de confluencia animal, vegetal y humana, un área autosustentable, que no obstante comienza a perderse de manera casi irreversible e irreparable.
El hombre que habitó hace cientos de años el territorio que hoy ocupa el estado de Sonora dejó diferentes testimonios de su cultura, entre los cuales se encuentran los grabados o las pinturas sobre algunas superficies rocosas.
Las pinturas prehistóricas de La Pintada están protegidas por salientes de rocas, aunado a la calidad del pigmento, el clima seco del lugar y debido a que se han provisto de un “barniz’’ natural, ha permitido su sobrevivencia a lo largo del tiempo.
El cañón donde se localizan las pinturas es un escondite que posee varias tinajas, la mayoría de los cuales conservan agua casi todo el año; cabe señalar que este tipo de sitios con pinturas por lo general se localizan cerca de depósitos naturales del vital líquido.
A la entrada del cañón se han hallado evidencias de habitación prehispánica, algunas figuras portan armas ofensivas y lo que parecen ser emblemas, también se pueden apreciar representaciones híbridas o fantásticas de hombre-animal.
Las figuras geométricas existen en gran cantidad y en variadas formas -rectángulos de diversos tamaños y diferentes posiciones, cruces con adornos, círculos sencillos y concéntricos- que expresan el grado de abstracción mental alcanzado por sus ejecutantes, apuntó el investigador.
Agregó que la superposición de algunas de ellas es muy importante, ya que se pueden encontrar ejemplos de pictografías prehistóricas, debajo de representaciones posteriores a la llegada de los europeos: imágenes de posible sentido mágico, junto con otro tipo de símbolos.
Rodríguez expresó que es indudable que el sitio fue ocupado por diversos grupos culturales y en distintas épocas, lo cual ha propiciado que se les adjudique tanto a los seris, como a los pimas y aún a los yaquis.
Algunos diseños de La Pintada son similares a otros encontrados en el resto de América y aún en el Viejo Continente. Otras figuras son más locales y se ubican sólo en Sonora, en la Península de Baja California y en el suroeste de Estados Unidos.
Por ello, el Centro INAH-Sonora trabaja entorno a la difusión y preservación de la riqueza de La Pintada en todos los sentidos, con el fin de enriquecer el acervo sobre patrimonio arqueológico y, al mismo tiempo, crear en el visitante una conciencia sobre el área.
Su ubicación
El cañón La Pintada está situado a 60 kilómetros al sur de la ciudad de Hermosillo, por la carretera internacional rumbo a Guaymas, Son.
La Pintada se encuentra enclavada en el extremo norte de una serranía que tuvo mucha resonancia en los siglos pasados, ya que fue de los lugares donde con más frecuencia se refugiaban partidas de indígenas, seris, mayos, pimas y yaquis, ante el empuje de las armas españolas.
En esos tiempos, era conocida con diversos nombres, siendo el más usado, Macizo del Cerro Prieto, Sierra Libre y Sierra Prieta.
Esta serranía tiene innumerables quebradas y cañones, haciendo el terreno muy difícil sobre todo para el que no lo conozca.