TORREÓN, COAH.- Ramón Iriarte no lo pudo negar: su pasión es y seguirá siendo el campo lagunero.
A pesar de que su participación dentro del sector agropecuario ha pasado del 95 al 30 por ciento, y su evolución en los negocios está directamente relacionada con el desarrollo de La Laguna, su vida y todas sus acciones han estado encaminadas en encontrar mejores condiciones para el desarrollo de este sector.
Actualmente trabaja en la implementación de invernaderos, los cuales, asegura son productivos, utilizan poca agua y generan fuentes de empleo.
El director de Iriarte y Asociados asegura que La Laguna tiene unas de las mejores condiciones de agua del norte del país, sin embargo, es necesario buscar un equilibrio.
A continuación le presentamos la entrevista completa con este empresario lagunero.
¿Cómo incursionó Ramón Iriarte en los negocios?
No soy de aquí, pero llegué a Torreón de año y medio de edad, pero dicen que uno no es de donde nace, sino de donde pasa la mayor parte de su tiempo. Yo tengo 65 años aquí en la Comarca Lagunera y me considero totalmente lagunero.
Mi padre era agricultor del cultivo regional. Esta región se movía alrededor del algodón. En 1900 el algodón era una joya, y aquí tenía dinamismo y productividad porque existían las condiciones óptimas y la tecnología de punta para eso. Entre el algodón y el cruce de los ferrocarriles fue lo que le dio impulso y vida a La Laguna y a los negocios de muchas familias.
Sin duda que su vida empresarial está directamente relacionada con el desarrollo económico de esta región. ¿Cuál es la retrospectiva que usted puede dar de La Laguna?
Estamos cumpliendo como ciudad 97 años y puedo decir que somos una ciudad nueva comparada con todas las que nos rodean: Saltillo, Monterrey, Chihuahua, Durango. La región siempre ha sido una fuente muy importante de emigrantes, de diversas regiones venían con muchos deseos de abrirse camino y La Laguna ofrecía todas esas posibilidades.
Las condiciones cambian, y siento que la Comarca Lagunera ha tenido la capacidad de adaptarse a los cambios, y a las necesidades de la misma globalización. De ser una región eminentemente agrícola se fue haciendo agroindustrial, y alrededor de cultivos como el algodón, trigo, uva y posteriormente la ganadería fue creciendo esa pequeña industria, como son las jaboneras, aceiteras, los despepites, la compresora, los molinos de trigo.
Luego las condiciones fueron cambiando, las modas, después se dio una gran competencia con el uso de la fibra sintética, del poliéster, del nylon y la gente fue haciéndose hacia ciertas novedades y la euforia del algodón disminuyó. Actualmente hemos regresado otra vez al algodón, pero desgraciadamente no ha podido repuntar.
¿Por qué considera que no lo ha hecho?
Por ejemplo, en Estados Unidos dan mucho apoyo a su sector primario y es porque la economía lo permite, aquí no tenemos los recursos para poder dar esos apoyos. Es así como entramos a competencia de una forma desleal. Últimamente el gobierno de Coahuila está dando el apoyo para que pueda competir en igualdad de precios.
La industria textil utiliza como nunca el algodón, y México está dejando de producirlo.
Sin embargo, La Laguna ha sabido adaptarlo a la industria y a la agricultura. Hoy en día existe una región agropecuaria importante, pero lo que es la agricultura se da solamente para el sostenimiento del ganado de engorda, la lechería y la avicultura, son las que han apoyado a la agricultura. Actualmente vemos otra opción con la implementación de invernaderos que requieren poca agua, son muy productivos, y pueden generar muchas fuentes de trabajo y de divisas para la región. Estamos en esa etapa para implementar invernaderos, que este año arranca.
La industria ha tenido una labor muy importante, la región ya no es eminentemente agrícola, ahora es metalúrgica, confección, ganadera, automotriz, es una economía más diversificada debido a que se ha sabido adaptar a los cambios.
A usted siempre lo han relacionado mucho con el sector agrícola y ganadero, sin embargo, ahora lo hemos visto participar en actividades del área comercial y de servicios. ¿También ha tenido que adaptarse?
Bueno si, hemos tenido que participar en otro tipo de actividades, específicamente en el área de servicios. En realidad fueron cuestiones personales por las que decidí participar en la coinversión del Hotel Camino Real y en las franquicias. Sin embargo, yo no dejo de participar en la actividad agropecuaria, todavía participo en la lechería con un sobrino. Tenemos unos huertos de nogal y seguimos participando en algo en ganadería.
Digamos que antes estaba enfocado en un 95 por ciento a la cuestión agropecuaria y hoy solo es un 30 por ciento.
¿Cuál es la perspectiva de La Laguna a diez años?
Yo siento que La Laguna tiene gente visionaria y emprendedora. Y sabe adaptarse a las necesidades y crecer en conjunto con los cambios. De ser una región eminentemente agrícola, su economía continúa en un proceso de diversificación. Considero que la agricultura puede mantenerse con los niveles que tiene y buscar más eficiencia en el uso del agua. El sector agropecuario tiene que buscar el equilibrio. Nadie del sector quiere que se acabe el agua. El campo lagunero siempre ha mostrado mucha eficiencia, del método tradicional hemos pasado por rayo láser, los riesgos por pivote, por aspersión, lo cual cada vez busca más eficiencia.
¿Le preocupa el factor agua para el desarrollo de la región?
Considero que debemos encontrar un equilibrio. Le puedo asegurar que esta región tiene las mejores condiciones de agua en el norte del país. Tenemos un gran acuífero, las dos presas están en condiciones naturales para tener agua para muchos años, y en muchos lugares no tienen esos recursos. Hay regiones en que las presas están abajo y las comunidades están arriba y aquí es lo contrario.
Usted es presidente actualmente de Fomento Económico de Coahuila (Fomec), mucha gente desconoce la función de este organismo,
¿qué es lo que persiguen?; ¿cuáles son los objetivos que busca como presidente?
Bueno, Fomec es un organismo que tiene ya varios años y ha sido promotor de las inversiones importantes en la región. La razón de ser del organismo es buscar traer las mejores inversiones tanto locales, nacionales e internacionales. Buscar las mejores condiciones para traer empresas con fuentes de trabajo que tanto necesita esta región. Sabemos que son tiempos difíciles, muchas de las inversiones y proyectos se han visto frenadas, pero actualmente hacemos contactos. Son alrededor de 35 empresarios con aportaciones voluntarias que se conjuntan con los apoyos del estado y el municipio.
¿Cuáles son los problemas que ha enfrentado como empresario?
Como productores hemos tenido muchas limitaciones de tipo agrario, seguridad en la tierra. El sector agropecuario siempre ha manejado mucho paternalismo, lo cual ha sido por necesidad, pero no produjo productividad, ni eficiencia, incluso manifestó corrupción. Ahora el problema es el crédito, la Banca hace diez años tenía mucha presencia en el área agropecuaria, sin embargo, la incosteabilidad del ramo ha hecho que la Banca haya retirado su participación en el sector. La fisonomía del crédito al campo ha cambiado, ahora viene a través de proveedores, pero muy poco de la Banca. Ojalá que la economía agropecuaria mejore, y exista otro orden jurídico, para que se reactive el crédito.
También fue presidente del Consejo Nacional Agropecuario, ¿qué logros obtuvieron en la etapa que participó?
De esto hace cuatro años, primero buscaba ser el principal interlocutor entre las autoridades y los productores para exponer las necesidades del campo, sobre todo del sector privado. Nos tocó ser parte de las negociaciones y la firma del Tratado con la Unión Europea y creo que nos sirvió un poco, ya que nos pusimos “las pilas” después de ver lo que había pasado con el Tratado de Libre Comercio con Norteamérica que de eso hace casi diez años. Ayudamos a mejorar las condiciones de negociaciones y si en algunos sectores vimos que no se cubrían bien las expectativas, tuvimos la precaución de buscar las mejores condiciones para México. Europa es el bloque más importante en volumen, aunque es más selectivo, pero es una oportunidad para nosotros.
¿Qué opina del Libre Comercio?
Actualmente el Gobierno sigue buscando más Tratados, creo que con Argentina y Brasil. Yo creo que primero deben consolidarse los que se tienen. Nuestro país en campeón en la firma de Tratados, pero lo que tiene que hacer es buscar la consolidación, ya que existen muchas divergencias, muchas fugas en términos de normas que no se han podido consolidar, y estamos a expensas de las normas de muchos países. Nuestros productos los importamos con las normas de ellos, pero cuando queremos exportar ellos ponen las reglas. Con esto quiero decir, que los tratados no están totalmente consolidados, como es el caso del TLCAN, que tiene aún muchos puntos sueltos y algunos nichos no están coordinados. Yo no entiendo cuál es el afán de las autoridades de firmar Tratados, no sé si por colgarse medallas, cuando los que existen todavía no están bien pulidos.
¿Si realizarán una revisión del TLCAN, qué puntos incluirían en esa agenda?
Primero se debe entender que el problema del campo es de todo el país, no solamente de ese sector y a pesar de esto, no se da la importancia al sector. Incluso creo que por un tiempo co-gobernaron muchos líderes que le hicieron daño al campo. Se habla mucho de apoyos, pero se habla poco de inversión, productividad, facilidades para producir, nuevos esquemas. Lo único que le falta es que se den las condiciones de orden jurídico, estado de derecho para que las inversiones se generen. El problema es que nadie quiere invertir en el campo. La inversión al campo no llega ni al uno por ciento.
¿Qué importancia tiene el sector agropecuario en una economía?
Llego a ser un 16 por ciento hace años y actualmente representa un cinco por ciento del Producto Interno Bruto. Ha ido descendiendo. A ese paso, no vamos a superar la dependencia alimentaria.
Pero debo decir que realmente México, no tiene una vocación como país para una gran agricultura. La mayor parte del territorio es altiplano, es un país de poca lluvia y ríos, el agua la tenemos en exceso en el sureste y en temporadas cortas. Hay países que tienen todo el año lluvias y de forma constante. Y todo lo que es el norte y centro no tiene condiciones naturales para la agricultura. En Estados Unidos hay ciclos muy definidos de lluvia que ayudan a la producción de granos. Aquí es un ciclo muy regular, es una región semidesértica.
¿Cómo debe ser un sector agropecuario moderno?
En la globalización el que no está al día y no es productivo queda fuera. Si no es eficiente la corriente lo arroya, aquí hemos estado fuera de esa corriente. Ahora parecen que ser más eficiente. La Laguna tiene condiciones para producir como hortalizas, tomate, lechuga, brócoli es competitiva y en el sureste para producir frutas tropicales, pero no en todo podemos ser, por ejemplo no somos competitivos en granos, a veces lo que se produce a veces ni de autoconsumo.
Pero otra contrariedad es que casi el 40 por ciento de la población en México esta en el campo y en Estados Unidos y Canadá no llega al dos por ciento.
¿Cómo observa las condiciones económicas actuales?
Hay un bache actualmente, pero poco a poco nos iremos recuperando. Pienso en el ámbito agropecuario nuestro reto será buscar al eficiencia y el equilibrio en la producción. En necesario que todos los sectores incursionen a un programa para lograr el equilibrio de los acuíferos, no sólo por un año, sino por varios años.
Debemos buscar mayor coordinación entre los diferentes poderes, entre Legislativo, Ejecutivo y Judicial. Hay países que nos han aventajado, porque han hecho las reformas necesarias, por ejemplo las reforma energética, fiscal, laboral, mientras no se dé una reforma fiscal en México todo será más complicado.