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LA HAYA, HOLANDA.-El primer tribunal permanente para crímenes de guerra se puso en marcha ayer cuando 18 jueces juraron administrar justicia “de manera imparcial y concienzuda”.
De todos modos podrían pasar años antes de que el Tribunal Internacional en lo Criminal oiga su primer caso, y además enfrenta una enérgica oposición de Estados Unidos e Israel, que temen pueda ser manipulado por sus enemigos políticos.
Ante la presencia de la reina Beatriz de Holanda y el secretario general de las Naciones Unidas Kofi Annan, los 11 varones y siete mujeres juraron uno por uno y se sentaron a una larga mesa en el “Salón del Caballero” del siglo XIII del parlamento holandés.
Organizaciones de derechos humanos saludaron el lanzamiento del tribunal como un mensaje a los tiranos de que deberán rendir cuentas por sus actos.
El titular de la organización de estados miembros, príncipe Zeid Al-Hussein de Jordania, aseguró que el tribunal aplicará la ley en forma equitativa para todos y que “no es el crisol mundial de las venganzas”, antes de tomar el juramento a los jueces.
Presidentes, jefes de gobierno y cancilleres se contaron entre los 550 invitados a la ceremonia, en la que Estados Unidos brilló por su ausencia.
Fue la presentación oficial del tribunal, que se creó el primero de julio después que 60 naciones ratificaron el Tratado de Roma de 1998.
En un acto simbólico de resistencia, activistas partidarios del tribunal izaron las banderas de los estados miembros en una playa cerca de La Haya, y rodearon cada enseña nacional con un cerco de sacos de arena.
para representar la resistencia contra una posible “invasión” estadounidense.
La bandera norteamericana también fue izada por Benjamin Ferencz, el fiscal principal estadounidense en el Juicio de Nüremberg después de la Segunda Guerra Mundial, quien argumentó que el mundo todavía necesita un mecanismo para juzgar a los acusados de crímenes de guerra.
El embajador de Estados Unidos en Holanda, Clifford Sobel, rechazó la invitación a asistir a la ceremonia.
El tribunal no puede iniciar sus procesos ni investigaciones hasta tener un fiscal, pero los países miembros todavía no han hallado un candidato por consenso. El mes próximo podría efectuarse una elección entre unos pocos candidatos.
Fuentes allegadas dijeron, con la condición del anonimato, que hay candidatos de Argentina, Canadá, Australia, Suiza y Gambia, entre otros.