Reuters
Nueva York, EU.- Los líderes de Estados Unidos, Gran Bretaña y España se reunirán mañana en las islas Azores, en un último esfuerzo diplomático para vencer la oposición en el Consejo de Seguridad de la ONU a una resolución que autorizaría el uso de la fuerza en Iraq.
El presidente George W. Bush viajará a las Azores, un archipiélago portugués ubicado a 1,450 kilómetros al oeste del continente europeo, para reunirse con el primer ministro británico, Tony Blair, y el presidente del gobierno español, José María Aznar, dijo ayer la Casa Blanca.
Los tres líderes, que enfrentan distintos grados de oposición a la guerra en sus países, son los patrocinadores de un proyecto de resolución en la ONU que abriría las puertas a una guerra en Iraq. El proyecto ha sido el centro de un enconado debate entre los miembros del Consejo de Seguridad y su futuro es incierto.
“En un esfuerzo por dar a la diplomacia hasta la última oportunidad, el presidente saldrá el domingo en la mañana para las Azores (...) a discutir perspectivas para resolver la situación pacíficamente, con diplomacia, en una búsqueda final de una resolución de las Naciones Unidas”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer.
Entre las maniobras diplomáticas para lograr un acuerdo, Chile propuso darle a Iraq un plazo de tres semanas para desarmarse, cumpliendo con cinco tareas específicas, o de lo contrario enfrentaría la posibilidad de una guerra.
Estados Unidos, Gran Bretaña y España pretenden un plazo mucho más corto. El presidente de Chile, Ricardo Lagos, dijo en Santiago que el plazo de tres semanas era “acotado y realista”.
Pero la Casa Blanca rechazó de inmediato la propuesta.
Estados Unidos no ha renunciado a una segunda resolución de la ONU que despejaría el camino para una operación armada contra Iraq. El secretario de Estado Colin Powell había dicho el jueves que incluso se podrían abandonar totalmente los esfuerzos de organizar tal votación en el Consejo de Seguridad.
“Todavía estamos buscando la votación para la semana próxima.
No hemos dicho qué fecha”, señaló Fleischer.
Un poco antes, el presidente Jacques Chirac dijo a Blair que Francia está lista para trabajar con Gran Bretaña a fin de explorar formas para desarmar a Iraq, pero mantuvo su rechazo a cualquier ultimátum, dijo ayer la oficina del presidente francés.
Una portavoz de Chirac dijo que Francia estaba lista para discutir propuestas bajo las cuales las inspecciones de armas podrían interrumpirse antes del período de 120 días que Francia ha respaldado hasta ahora. Chirac y Blair hablaron por teléfono.
Exhortación a atacar intereses de EU
En Bagdad, uno de los principales clérigos exhortó a los musulmanes a atacar los intereses estadounidenses en todo el mundo para contrarrestar una invasión de alrededor de 250,000 efectivos militares de Estados Unidos y Gran Bretaña concentrados en el Golfo Pérsico.
Según diplomáticos, Washington podría atacar en los próximos días.
España lanzó el viernes un llamado urgente a sus ciudadanos en Iraq para que abandonen el país “en vista del rápido deterioro de la situación internacional”.
Rusia, Alemania y Francia reiteraron su oposición a la posible invasión, diciendo que las inspecciones de armas de la ONU son aún el mejor camino a la paz con el presidente iraquí Saddam Hussein.
Se esperaba que Bagdad, para prevenir un conflicto, enviara ayer un informe a los inspectores de armas sobre su destrucción del agente nervioso VX.