La colonia Francisco Zarco comenzó a formarse cuando los molinos de piedra dejaron de funcionar
Gómez Palacio, Dgo.- Atrincherados por las necesidades viven decenas de familias en la colonia Francisco Zarco. Carecen de todo: pavimento, drenaje y hasta de transporte público. Después de tantos años no han logrado el avance necesario a pesar de residir a unas cuantas cuadras del centro de la ciudad.
La colonia Francisco Zarco es mejor conocida como “Trincheras”. Ahí los revolucionarios se escondían entre los sembradíos y las piedras del cerro para disparar al enemigo sin peligro de ser heridos.
Carmen Rodríguez Andrade lleva toda su vida viviendo en “Trincheras”. Una y otra vez, tanto sus padres y abuelos, le han contado que la colonia comenzó a formarse cuando los molinos de piedra dejaron de funcionar.
“Antes aquí había unos molinos de piedra rústicos, pero no sé qué pasaría con ellos, los trabajadores sacaban piedra y todo el material que podían del cerro, a esta parte de la colonia le decimos el corte porque fue la forma que dejaron y en donde se comenzaron a construir las primeras casas”.
La colonia Francisco Zarco es famosa, según Carmen, por su historia. Los revolucionarios se atrincheraron en esta parte de Gómez Palacio porque el cerro les permitía circular y disparar a cubierto. Ahora hay quienes dicen que existen tesoros escondidos y también mercurio.
Pero en el lugar donde alguna vez Francisco Villa luchó por la causa revolucionaria, más de dos calles carecen de pavimento como: la Prolongación Rayón y Pánfilo Natera. En tiempo de lluvias los encharcamientos obligan a las familias a salir de sus casas sólo lo indispensable.
Gracias al esfuerzo de algunos líderes, dice Carmen, ciertas calles de “Trincheras” recibieron los beneficios de la pavimentación, pero varias cuadras quedaron sin ser atendidas y después de tanto tiempo carecen de drenaje y pavimento.
Carmen dice que muchos vecinos no se apuran por vivir entre carencias y por eso nunca hacen la lucha de pedir ayuda al Ayuntamiento. Afortunadamente, señala, por lo menos se acabaron los tiempos en que los jóvenes ociosos y drogadictos eran el temor de las familias.
En este sector cerca de 16 familias carecen de drenaje, para hacer sus necesidades fisiológicas construyeron letrinas en los patios de sus casas, pero en tiempo de calor los olores son insoportables y entonces deben ponerles cal.
Según Elodia Martínez cuando solicitaron la introducción de drenaje en la Presidencia Municipal, les dijeron que era imposible, pues para instalar la tubería es necesario extraer piedra de algunas partes del cerro.
Por eso las familias están resignadas a vivir sin drenaje y comprando un bulto de cal durante la temporada de calor para aguantar los malos olores. “Debe salir muy caro quitar la piedra porque en la Presidencia Municipal de plano nos dijeron que no”.
La falta de transporte también es un problema grave en este sector. Con más de 50 años de edad, María Castañeda debe armarse de paciencia cada vez que sale de su casa para comprar la despensa, pues a “Trincheras” no hay camión que preste servicio.
Por eso en más de una ocasión, María se ha quebrado los huesos –al igual que muchas vecinas y niños-. Y es que para llegar a ciertas cuadras de la colonia es necesario trepar por las piedras y en tiempo de lluvia se ponen resbalosas.
Las personas de la tercera edad, dice María, sufren más cada vez que tienen que subir y bajar a la colonia. Quienes tienen posibilidades económicas pagan los servicios de un taxi, pero la mayoría apenas si cuenta con lo necesario para sobrevivir, por eso deben ingeniárselas para llegar a sus casas sin sufrir ningún accidente.
“Aquí es una quebradera de huesos. Cuando la gente se enferma ni la ambulancia puede subir, tampoco hay teléfonos públicos, estamos muy olvidados, nunca nos llega ayuda de nada y yo creo que así vamos a seguir por mucho tiempo”, dice Carmela.
Las deficiencias
Alrededor de 200 familias de la colonia Francisco Zarco comparten problemas por carecer de los siguientes servicios básicos:
· Pavimento
· Drenaje
· Baja presión de agua
· Alumbrado público
Fuente: vecinos de la colonia Francisco Zarco