Xenofobia divide a legisladores

Representantes de Arizona se enfretan a diputados de Chihuahua y Texas

SALTILLO, Coah.- Ríspida, de pronto, se volvió la somnolienta reunión de la Conferencia Legislativa Fronteriza cuando los diputados de Chihuahua, denunciaron los malos tratos que sufren los connacionales que cruzan el río Bravo hacia los Estados Unidos, reclamando un trato justo para los ilegales. La representación de legisladores de Arizona, respondió molesta. “No se dará el acuerdo migratorio Bush-Fox”, fue la conclusión sobre este tema; nadie la contradijo.

Esto quedó de manifiesto ayer, en la larga reunión de casi diez horas, con un receso breve, que sostuvieron los Congresos de los estados fronterizos de México y Estados Unidos, para discutir los temas de migración, ecología e infraestructura fronteriza. En los dos primeros asuntos, hubo acuerdos.

El tema que dividió a los legisladores, inclusive a los propios estadounidenses, fue el de la política migratoria “discriminatoria” de los Estados Unidos. El único acuerdo que se dio en este problema, fue que se agendará de nuevo para su discusión en la reunión de Tucson, Arizona, a mediados de noviembre.

A esta reunión, asistieron legisladores de Coahuila y Chihuahua, Tamaulipas y Nuevo León, por México; y de Texas, Arizona y California, por los Estados Unidos.

NO HABRÁ ACUERDO FOX-BUSH

Las horas, los temas y los acuerdos habían transcurrido sin mayor problema en la reunión. Aproximadamente a las 15: 00 horas hubo un receso para comer. Al regreso, todos pensaron que el resto de la sesión sería mero trámite. Pero cuando se tocó el tema de la migración, todo cambió.

El diputado local de Chihuahua, Ricardo Castro López, en su intervención dijo que nada ni nadie va a detener la migración de compatriotas ilegales hacia los Estados Unidos, y que el acuerdo en este sentido entre los presidentes George Bush y Vicente Fox, no será realidad.

Explicó que tan sólo para atender una “migración legal” el gobierno estadounidense tendría que entregar 300 mil visas anuales al año, “cuando menos”, para que igual número de mexicanos consigan trabajo y resuelvan sus problemas económicos en el país vecino, con lo que muchos americanos no estarían de acuerdo.

Hizo ver además, que un acuerdo migratorio, conllevaría a fijar muchos otros acuerdos, como el del petróleo, con el que también muchos mexicanos no aceptarían.

Consideró que una solución sería que los congresos estatales mexicanos pudieran legislar sobre migración en sus propios estados, independientemente de los acuerdos que busque el presidente Fox.

En sus señalamientos sobre los malos tratos que sufren los connacionales ilegales en territorio estadounidense, dijo que esta política afecta hasta los familiares de quines cruzan la frontera.

Expuso el caso de una persona que falleció hace mes y medio en el desierto de Arizona, cruzando por Chihuahua, cuyo cadáver no ha sido devuelto a sus familiares en México, porque las autoridades americanas por el estado de descomposición en que se encontró, no han podido aplicarle la prueba de huellas digitales y de DNA, pese a que sus familiares que tuvo en vida, ya identificaron el cuerpo desde hace varias semanas, “por lo que han gastado mucho dinero en tantas vueltas, sin lograr nada”.

POLÍTICA XENOFOBICA

Por su parte, el también legislador de Chihuahua, Víctor Hugo Estala Banda, dijo que la política migratoria de los Estados Unidos, es xenofóbica, deshumanizante y racista.

Preguntó que por qué el gobierno estadounidense permite la existencia de bandas como la de los hermanos Barnet, que cazan ilegales como animales en Arizona.

“Por qué los norteamericanos no actúan con firmeza para detener estas agresiones? ¿Por qué el repudio a todo aquel que tenga el aspecto de mexicano?”, cuestionó mirando fijamente a la delegación de legisladores de Arizona.

Dijo que es inadmisible que los periódicos de Arizona, inciten a los ciudadanos norteamericanos a formar grupos como “Guardianes de la Frontera con México”, “Rescate Ranchero” y “Patrulla Americana”, que son verdaderos cazadores de seres humanos, específicamente migrantes mexicanos.

El diputado chihuahuense, pidió a los legisladores de Estados Unidos y de México que unan sus esfuerzos para pedir al Congreso del vecino país y a su gobierno federal, que detenga estas cacerías humanas y que garantice la integridad física de los mexicanos perseguidos; además que castigue a los culpables que se dedican a asesinarlos.

SE MOLESTA LA DELEGACIÓN DE ARIZONA

En respuesta, los tres representantes de Arizona, rechazaron apoyar a los diputados mexicanos para manifestarse en contra de su gobierno y exigir justicia para los mexicanos ilegales.

El representante de la Cámara (Congreso) de Arizona, Ray Barnes, quien frisa en los 60 años, aproximadamente, rojo del coraje no escondió su enojo y rechazo frente a tal petición, que consideró ilegal, conforme a su Constitución, la que dijo había jurado respetar cuando ocupo su cargo de legislador.

“Creo que es injusto que los legisladores de México me pidan que ponga en peligro mi juramento y me fuercen a abandonar mi cargo, porque defendería algo ilegal”, espetó en tono flemático.

Aclaró que no tiene nada en contra de los “hispanos” y que no es xenofóbico, “por lo que no es justo que este cuerpo legislativo no acuse de discriminatorios, porque nos negamos a violar las leyes de los Estados Unidos”, expresó alzando la voz.

SE DIVIDEN LOS REPRESENTANTES DE EU

Los legisladores de ascendencia “hispana”, no estuvieron de acuerdo con sus compañeros de Arizona. Uno de ellos, de Texas, dijo que en su estado los grupos armados que cazan ilegales actúan fuera de la ley y que “pronto serán castigados”.

Roberto Gutiérrez, también diputado texano, preguntó a los de Arizona: “¿Cuándo se ha visto en Estados Unidos que un canadiense, legal o ilegal, sea maltratado? ¿Acaso se molesta a los mexicanos por su piel morena o menos clara que la canadiense?”

“Yo no estoy en contra de la migración canadiense”, respondió con burla un legislador de Arizona, cuyo comentario pasó desapercibido en la discusión.

ACUERDOS AMBIENTALES

En esta reunión de congresistas estatales de ambos países, organizada por el Congreso de Coahuila, se llegaron a acuerdos en materia ambiental.

Entre lo más importante en este sentido se acordó llevar a cabo labores de limpieza de los siete millones de llantas viejas ubicadas en tiraderos a lo largo de la frontera de los dos países.

Leer más de

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 47162

elsiglo.mx