Bush is happy. Colin Powell también, very happy. Y Jeb Bush, gobernador de Florida, estado que cocinó el fraude electoral para instalar en el poder al brother.... ni hablar. En momentos en que la popularidad, que debía llevarlo a la reelección, está en picada por la carísima pifia de Irak y de la economía, por la rebelión de España y el retiro de sus tropas de Mesopotamia -¡Viva Rodríguez Zapatero!- y por la vergüenza mundial del video de sus sádicos soldados, violando en la cárcel a los prisioneros de guerra de un país que USA invadió y destruyó sólo por las pistolas del propio George W. Bush, surge la maravillosa noticia: “México obedece y le escupe los dos ojos a Cuba”. -Vaya, dice W., ya era hora. Estábamos por creer que música pagada toca mal son.-
-Bueno, dice Colin, ya habíamos logrado hacer votar a México en Ginebra, en la línea de Honduras, contra Castro que tanto y tanto viola los derechos humanos de los cubanos mientras que nosotros sólo violamos los del mundo entero. Fox es sincero, Mister President, le importan mucho, los derechos humanos en todas partes del orbe, salvo en Ciudad Juárez, quizás porque como hay tantas maquiladoras allá... no quiere dañarnos. Pero con esto que planeamos contra Cuba, Mr. President, ya puedo anunciar mañana mismo que estamos listos para salvar a “ese pobre país”. Vamos a imponer los derechos humanos y la economía de mercado. Ah, Mr. President va a repuntar maravillosamente su popularidad y será usted un héroe. Tiene la reelección en la bolsa. No hay duda. Lo único que sería bueno es decirle a Rumsfeld que no se sobrepase. ¿Lo quiere usted dejar en Irak? Bueno, pero ¿se imagina lo que harán nuestros soldados con los cubanos? -Dear Colin, ya calentamos a la isla con la torturas de Guantánamo con los talibanes, así que.... (Si el lector duda de la veracidad de esta conversación que pida el video a la Casa Blanca).
Un ataque de hilarante macartismo enloqueció en días pasados en México City al visceral y mal vestido equipo del presidente Vicente Fox, que naturalmente se encontraba en mangas de camisa y sin corbata para tomar una de las más drásticas decisiones de la historia de 100 años de hermandad con Cuba, no sólo sentimental sino, como bien dijo Lorenzo Meyer, indispensable alianza para que ambas naciones puedan defender mínimamente su dignidad nacional del grotesco apetito imperial apoyado ahora por el global. Rejuvenecidos los televidentes, escuchamos términos que hace décadas no oíamos (el partido comunista, los agentes, los espías, etc.) al recibir la noticia de que México expulsaba al embajador de Cuba, dándole 48 horas para salir de nuestro territorio y que para el consejero político de la embajada la orden era: Te me vas de volada y sin comer. El secretario de Gobernación, Santiago Creel, al que su nerviosismo por ser presidente le impide hasta rasurarse convenientemente y ocuparse como Dios manda de su familia, mostró una arma secreta y sumamente novedosa contra Cuba: _ Denunciemos su comunismo, propuso. Recuperemos el lenguaje de “Las Brujas de Salem” para hacer comprender a nuestros buenos y pacientes electores que lo que estamos combatiendo es al horrible comunismo que nos envió a sus espías a entrevistarse con Leonel Godoy y Jesús Ortega, criminales simpatizantes y apoyadores de ese tal por cual de López Obrador. -Sí, ya es hora de acabar con todos estos comunistas de quinta, aplaudió Derbez, el empleado del Banco Mundial que desconocía la doctrina Estrada cuando con su varita mágica Fox lo hizo secretario de Relaciones Exteriores, pero que ya recita rebién la “Convención de Viena”. Pero los espías vieron a todo mundo. También se entrevistaron con Diego y le dieron los puros que le manda el comandante, digo, el dictador de la isla. -Todo fuera como eso, dijo Santi. Mantengo esa información secreta y ya. ¿Quién la va a decir? (Si alguien duda de esta otra conversación que pida el video a Los Pinos).
El “pronto” de Fox o mete la pata y tiende la mano, podríamos llamar al increíble episodio, aparentemente tonto, que acabamos de ver y padecer. Pero... ¿ Es realmente un “pronto tonto” más de este Presidente tan peligroso, el que gestó una decisión histórica que no sólo afecta a México sino al panorama internacional que ya bastante fastidiado está? Nuestro Presidente es capaz de todos los “prontos”, pero éste lo inventó o aprovechó o creó para iniciar una batalla diplomático-pelada contra Fidel Castro para poder cumplir con Bush. De esto no hay duda y prueba que así fue es la prisa de Colin Powell en anunciar una posible invasión a Cuba, avalada o no por la ONU, para salvar al pueblo cubano de Saddam Hussein, digo, de Castro, aunque el Gobierno gringo se apresuró a decir también, que este anuncio nada tenía qué ver con la actitud de México... Fox puede ahora tenderle la mano al viejo jefe de Estado Castro, pero el daño está hecho, la puerta abierta para la invasión (de cualquier especie) a Cuba y a la reelección. Todo esto fue planeado hace mucho: en 1997 cuando Fox inició su precampaña (que hoy continúa Castañeda) yendo a ver a los gringos para ofrecer petróleo, energía eléctrica, Cuba, etc. Entonces fue cuando “le pagaron la música”, cuando le dieron esas aportaciones de capitales prohibidos por la Constitución Mexicana, a los “Amigos de Fox”, que el IFE de Woldenberg no quiso revelar porque significaba que el Presidente, éste también, podía resultar ilegítimo. Aquellos capitales cuyo origen conoce el mejor consejero del anterior IFE, Jaime Cárdenas, al que le callaron la boca. Capitales que tramitó un cierto gringo-mexicano llamado Juan Hernández, que Fox resguardó en Los Pinos, como su “cronista”. www.manu-dornbierer.com.mx