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MÉXICO, DF.- Pablo Gómez Álvarez, coordinador de la diputación federal del PRD, advirtió que la “política de inhabilitación de sucesores” instrumentada por el presidente Vicente Fox, la divergencia interna del PRI sobre la Reforma Electoral y la inflexibilidad del PAN para apoyar sólo la propuesta electoral del Ejecutivo, dificulta el entorno hacia los comicios federales de 2006.
“No podrá haber un camino a la transición, si años antes de la sucesión presidencial el Presidente fuerza al país e inhabilita a los posibles contendientes. En este caso uno, (Andrés Manuel) López Obrador y también -probablemente- de sus intentos a miembros de su propio partido, en una pre-contienda donde el Presidente tiene interés personal y no sólo interés político”, dijo ante sus legisladores de su bancada reunidos en un hotel del puerto de Acapulco.
Dijo que “este intento de forzar políticamente al país, es más que una regresión... en términos más directamente políticos, le ofrece al viejo partido, con quien él mismo se enfrentó en varias contiendas y señaladamente en la de 2000, el poder de la decisión de resolver sobre la aventura política presidencial”.
La reunión en el puerto de Acapulco permitirá a los diputados federales del Partido de la Revolución Democrática (PRD) hacer una evaluación interna sobre su desempeño en la 59 Legislatura y fijar la estrategia a seguir sobre temas relevantes que tienen impacto directo con la situación política del país, como la reforma electoral.
“Nuestro grupo está planteando y seguirá planteando un período extraordinario de sesiones para aprobar, por parte del Congreso, una Reforma Electoral”, indicó.
“El proyecto del Presidente -agregó- es limitado. Tenemos un problema en el proceso electoral que vamos a discutir en esta plenaria de grupo (hoy viernes), con todo detalle. Tenemos un problema, en la medida en que hay divergencias internas en el PRI (Partido Revolucionario Institucional) y una inflexibilidad en el PAN”, comentó.
Planteó los elementos de interés para el PRD y que buscará incorporar en esa reforma electoral: “No puede haber una Reforma Electoral que realmente lleve ese nombre, si no hay una reglamentación precisa del acceso de los partidos a los medios de comunicación. No hay una democracia que se dirija a condiciones de equidad en la contienda y de oportunidad en las fuerzas políticas, si no está resuelta la cuestión del acceso a los medios de comunicación, en ninguna parte del mundo”.
Agregó: “Cuando la Ley es clara y se cumple, el concesionario sabe a qué atenerse; tiene seguridad de que no habrá arbitrariedad de la parte gubernamental y que el Estado tendrá que respetar los derechos de todos y las normas establecidas.
Eso ofrecemos a quienes siempre demandan seguridad jurídica y lo que proponemos entonces en relación con el acceso de los partidos a los medios, es seguridad jurídica”.
